Una nena platense brilla en la escuela del Teatro Colón

Tiene 9 años recién cumplidos y diariamente viaja a Buenos Aires para formarse y convertirse en una bailarina de élite. Sus profesores aseguran que tiene condiciones para proyectarse internacionalmente

En la familia Gallardo el despertador suena a las 4.30 de la mañana. Cuando la mayoría de los platenses todavía disfrutan de un sueño profundo, Nara, de 9 años, desayuna con un rodete en el pelo, armado con la urgencia de subirse a los pocos minutos a un micro con destino a Capital Federal: debe llegar a horario a las clases de la escuela de danza del Teatro Colón. 

Aunque por temor a despeinarse ni siquiera duerme, el tiempo en el que con su mamá viajan hacia Buenos Aires ella lo usa para soñar despierta: quiere ser una estrella internacional de la danza. 

“Esto que estoy haciendo es porque desde que tengo 3 años fantaseo con poder bailar en París, en la Torre Eiffel, o en Estados Unidos”, le comentó Nara al diario Hoy. Los que la conocen coinciden en que le sobran condiciones para lograrlo. Tras audicionar con un puntaje de 100 sobre 100, este año ingresó a la prestigiosa escuela del Colón, una verdadera usina de bailarines de talla internacional. Allí estudia a diario Francés, Música y preparación física.

Eso sí, para no quedarse libre, debe llegar al teatro a las 7.30 de la mañana. “Son muy rigurosos con el tema de las faltas y las llegadas tarde. Apenas puede ausentarse diez veces en el año. La vida de los bailarines es muy disciplinada”, explicó Cecilia, su mamá.

Una vez concluidas las clases de danza, vuelve a tomar el micro de regreso a La Plata y pasadas las 13, ingresa al Colegio San Antonio. Luego, a media tarde, asiste a la academia de baile de Romina Pujol, situada en calle 34, entre 22 y 23. 

Su madre, orgullosa, no deja de resaltar el esfuerzo que Nara está realizando para poder llevar adelante su sueño: “Todos estamos poniendo mucha voluntad, pero lo de ella es sobrenatural. Cambió de colegio y dejó todo para perseguir su pasión”. Premiada y destacada en concursos de alcance sudamericano, como los casos de Danza América y Villa Danza, ambos realizados en la provincia de Córdoba, la joven Gallardo viene incursionando en este arte desde sus 6 años, dando sus primeros pasos en la mencionada escuela de danza platense .

“Entrar en una escuela tan prestigiosa es algo tremendamente difícil y ella lo hizo con excelencia. Ahora le tocará hacer carrera, la vidriera que da el Colón es enorme”, dijo su profesora platense.

Para Pujol, que la acompañó en su crecimiento y en su desarrollo como bailarina, no dejan de ser sorprendentes las aptitudes de la pequeña: “Hace 23 años que estoy en el ambiente y es la primera vez que veo algo así. Tiene un talento natural y no solo para la danza. En la escuela querían adelantarla de 3º a 5º grado. Va a natación y es campeona. En todo lo que hace es sobresaliente”, aseguró.

Segura de que cumple los sueños quien se lo propone, Nara proyecta sus objetivos como si fueran escalones, de a uno y consecutivos. Además de la danza, le gustaría poder seguir una carrera universitaria: “El día de ma­ñana también quisiera ser médica, para ayudar a la gente que más lo necesita”, concluyó la pequeña, que en breve saldrá al mundo a representar al país, y a nuestra ciudad, en los más prestigiosos teatros.