Como confirmó el titular del laboratorio Richmond, este lunes se inició la producción del segundo componente. Un experto remarcó a diario Hoy que la seguridad está garantizada por exhaustivos controles de calidad.
El titular del laboratorio Richmond, Marcelo Figueiras, anunció el inicio de la producción en Argentina de segundas dosis de la vacuna rusa “Sputnik V” a partir de este lunes, lo que significa un gran avance en nuestro país teniendo en cuenta la gran demanda que hay para completar el esquema de vacunación.
En diálogo con diario Hoy, el virólogo molecular Mario Lozano señaló que no implica un nivel de complejidad mayor la producción de segundas dosis en comparación con la primera, sino que lo más difícil es pasar de una a la otra en la adaptación de la fábrica.
“No es compleja la producción de segundas dosis, pero sí saltar de la producción de un componente a otro en la fábrica, porque es como comenzar algo de cero y hay que adaptarse. No es más complejo de producir que las primeras. Sputnik es en sí misma una vacuna combinada, hay vacunas que usan la misma tecnología y son monodosis que tiene como único componente el mismo adenovirus que la primera de Sputnik y otras, como el segundo”, detalló.
En ese plano, el experto destacó que “probablemente, Rusia produjo más del componente 1 para poder acelerar la vacunación a mayor cantidad de gente, así como hicieron muchos otros países, además que con una dosis ya se alcanza el 80% de protección. Esto no es tocar un botón y empezar de golpe, hay una adaptación, un proceso que empieza de a poco”.
Este primer lote de segundas dosis constará de 150.000 unidades, para el cual se emplearán 100 litros del principio activo, que fueron enviados al país desde Moscú.
“Estas vacunas llevan un montón de controles de calidad. Richmond envió las dosis para control, volvió la respuesta positiva, pudieron hacer otro lote que se volvió a enviar para que se confirme que estaba bien y unos días atrás se aprobó. Se han hecho controles muy exhaustivos sobre la producción del laboratorio, que es de muy alta calidad, tiene tecnología adecuada y está invirtiendo para producir desde cero acá y que no sea necesario que Rusia envíe el componente”, marcó Lozano.
Ante los últimos casos donde las personas comenzaron a “pedir” por una u otra vacuna, el especialista aseguró que “todas las vacunas que se están aplicando en el país son de muy buena calidad”.
“Todas las que se aplican a nivel global son útiles pero si se compara la vacuna que se usa en Chile o Brasil, la Sinovac que da 50%, es una que pasa los niveles de aceptación muy justo; las que se aplican acá tienen arriba del 80% de eficiencia como mínimo, y la Sputnik V es de las mejores que hay en el mundo”, resaltó.