Castillo fue destituido y ya juró su reemplazante

Luego de que el Congreso de Perú ­aprobara este miércoles la destitución del hasta ayer presidente Pedro Castillo, quien horas antes había disuelto el cuerpo, Dina Boluarte juró como primera presidenta en la historia de ese país sudamericano, en una sesión convocada de urgencia por el Congreso.

En este contexto, en la mañana, Castillo había disuelto el Congreso y dijo que gobernaría por decreto, lo que fue considerado como un “golpe de Estado” por dirigentes de varias extracciones políticas, quienes se reunieron de inmediato en sesión especial en el Parlamento y aprobaron la vacancia del exmandatario. Además, esa decisión del exmandatario motivó inmediatamente la renuncia de ministros.

En un mensaje televisado, Castillo convocó “en el más breve plazo a elecciones para un nuevo Congreso con facultades constituyentes para elaborar una nueva Constitución en un plazo no mayor de nueve meses. A partir de la fecha y hasta que se instaure el nuevo Congreso, se gobernará mediante decretos ley”.

“En atención al reclamo ciudadano a lo largo y ancho del país, tomamos la decisión de establecer un gobierno de excepción orientado a establecer el Estado de derecho y democracia, a cuyo efecto se dictan las medidas: disolver temporalmente el Congreso de la República e instaurar un gobierno de emergencia excepcional”, había expresado.

El Congreso de Perú adelantó ayer unas horas la sesión en donde tenía previsto tratar la tercera moción de vacancia (destitución) contra Castillo desde que asumió por “incapacidad moral permanente”. La sesión comenzó poco después de las 13, hora local. Para remover a un presidente, la Constitución peruana exige 87 votos, cifra que fue superada por las 101 voluntades que obtuvo la destitución del ahora exmandatario.

La moción de vacancia es la tercera contra Castillo en 16 meses en el poder. En marzo, no alcanzó los votos para removerlo, y en diciembre del año pasado, el Congreso la desestimó antes de debatirla.

Es válido destacar que durante la jornada pasada Castillo se transformó en el cuarto presidente de Perú que cesa el puesto de manera anticipada en menos de cinco años, período en el que el Congreso también destituyó a Martín Vizcarra, a la vez que renunciaron Pedro Pablo Kuczynski y Manuel Merino.

La nueva presidenta, Dina Boluarte

Tras la destitución de Pedro Castillo, Dina Boluarte, abogada de 60 años, de se convirtió ayer en la nueva presidenta del país sudamericano de Perú, siendo la primera mujer en ocupar el cargo.

En este sentido, la funcionaria, quien ocupaba la vicepresidencia de ese país desde julio del año pasado, al hablar ante el Congreso durante su juramentación dijo que, “como todos conocen, se ha producido un intento de golpe de Estado, una impronta promovida por Pedro Castillo, que no ha encontrado eco en las instituciones de la democracia y en la calle”.

En su discurso, la abogada pidió una tregua política para instalar un gobierno de unidad nacional, con un “gabinete de todas las sangres”. Poco después ingresó al Palacio del Gobierno.

Luego de que el saliente presidente pretendiera cerrar el Congreso, Boluarte marcó distancias con su otrora aliado: “Se trata de un golpe de Estado que agrava la crisis política e institucional”, dijo.

Boluarte fue ministra de Inclusión Social desde la posesión de Castillo hasta el mes pasado. La oposición parlamentaria la tuvo en su mira y pretendió destituirla por haber continuado figurando como presidenta de un club privado, a pesar de que por ley eso es incompatible con ser ministra.

Sin embargo, esta semana el Congreso archivó el caso por considerar que no hubo incompatibilidades y de paso dejó sin efecto otra denuncia que sin mayores fundamentos se le había hecho por supuesto nepotismo.