Francia suma 21.150 casos y 436 muertos, con un ingreso en la UCI cada cuatro minutos
Desde el miércoles se admitieron 311 personas en cuidados intensivos "a pesar de la ralentización de la circulación del virus", dijo el ministro de Salud.
"No propiciar ni avalar o utilizar mecanismos que hagan de la grave crisis una herramienta de carácter electoral o social”, puntualizó.
20/11/2020 - 00:00hs
En el marco de un seminario organizado por el Vaticano que tuvo por objeto evaluar la situación de la Iglesia en Latinoamérica, una intervención del Papa Francisco apuntó directamente a las y los líderes políticos del continente.
“Me dirijo a quienes ejercen responsabilidades políticas y me permito, una vez más, convocar para rehabilitar la política, que es una altísima vocación, que es una de las formas más preciosas de la caridad, porque busca el bien común”, comenzó el sumo pontífice en su mensaje virtual.
El Papa se manifestó en muchas oportunidades con un mensaje a los líderes políticos y sociales durante estos meses de crisis generalizada que acrecentó la pandemia del coronavirus en todo el mundo.
“Esto nos pide a todos aquellos que tenemos una función de liderazgo aprender el arte del encuentro y no propiciar ni avalar o utilizar mecanismos que hagan de la grave crisis una herramienta de carácter electoral o social”, puntualizó el referente católico y agregó que “junto con la pandemia existen otros malestares sociales, la falta de techo, la falta de tierra y la falta de trabajo, y estos requieren una respuesta generosa y una atención inmediata”.
El mensaje apunta a la situación de la crisis sanitaria en los países latinoamericanos donde también se presentaron graves problemas políticos, algunos con rápida resolución y otros que aún están en medio de las turbulentas negociaciones.
Por citar algunos casos, en Ecuador hubo renuncias de funcionarios, en Colombia se atraviesa una fuerte recesión sin precedentes en 20 años, en Perú el Congreso revocó la presidencia de Martín Vizcarra, y la lista de cuestiones en el resto de los países del Sur y América Central es extensa.
“La profundidad de la crisis reclama proporcionalmente la altura de la clase política dirigente capaz de levantar la mirada y dirigir y orientar las legítimas diferencias en la búsqueda de soluciones viables para nuestros pueblos”, enfatizó el Papa.
En ese orden, el máximo representante de la Iglesia Católica llamó a que este tipo de encuentros “pueda inspirar caminos, despertar procesos, crear alianzas e impulsar todos los mecanismos necesarios para garantizar una vida digna a nuestros pueblos, especialmente a los más excluidos, a través de la vivencia de la fraternidad y la construcción de la amistad social”.
“Cuando digo los más excluidos, no lo digo como diciendo dar la limosna a los más excluidos, o como un gesto de beneficencia, no, sino como clave hermenéutica”, aclaró el sumo pontífice.