El primer ministro israelí llamó al jefe de la ONU a retirar a los cascos azules de Líbano
Netanyahu sostuvo que la negativa del organismo internacional de evacuar a los soldados de la FINUL “los convierte en rehenes de Hezbollah”.
Netanyahu sostuvo que la negativa del organismo internacional de evacuar a los soldados de la FINUL “los convierte en rehenes de Hezbollah”.
14/10/2024 - 00:12hs
Tras los recientes casos de cascos azules heridos en medio de los enfrentamientos entre las tropas israelíes y los terroristas de Hezbollah, Benjamin Netanyahu instó al secretario general de la ONU, António Guterres, a poner fuera de peligro “inmediatamente” a las fuerzas de paz de la organización en Líbano (FINUL, por sus siglas en inglés).
“Señor secretario general, ponga fuera de peligro a las fuerzas de la FINUL. Tiene que hacerse ahora mismo, inmediatamente”, declaró el primer ministro israelí en un discurso grabado, dirigiéndose directamente a Guterres. Asimismo, el premier acusó a la misión de la ONU en el sur de Líbano de ser “escudos humanos” del grupo terrorista Hezbollah, después de que cinco cascos azules resultaran heridos en los últimos tres días.
La negativa a “evacuar a los soldados de la FINUL los convierte en rehenes de Hezbollah. Esto pone en peligro sus vidas y las de nuestros soldados”, dijo el mandatario en el mensaje grabado. En ese sentido, recordó que Israel solicitó la retirada de los cascos azules en varias ocasiones. “Hemos recibido repetidas negativas, todas dirigidas a proporcionarle escudos humanos a los terroristas de Hezbollah”, sostuvo. Los cascos azules se encuentran en Líbano de conformidad con la resolución 1701 del Consejo de Seguridad de la ONU, que puso fin a la guerra de 2006 entre Israel y los terroristas de Hezbollah.
En los últimos días, la FINUL denunció que cinco de sus soldados resultaron heridos en medio de los enfrentamientos en la frontera entre Líbano e Israel. Netanyahu aseguró que Israel hace “todo lo posible” por evitar el daño a los cascos azules, pero que la mejor manera de prevenir estos incidentes es sacarlos fuera del territorio, para lo que haría falta una decisión del Consejo de Seguridad.
Desde hace tres semanas, Israel lleva a cabo una campaña de intensos bombardeos contra objetivos terroristas en el sur y el este del Líbano, así como en Beirut. Lo cierto es que la ofensiva israelí contra Líbano ha provocado al menos 2.141 muertos y 10.099 heridos, según el Ministerio de Salud libanés, mientras que la Organización Internacional para las Migraciones se prepara para asistir a 400.000 desplazados por el conflicto.