Legisladoras de Bolivia terminaron “a las piñas” en una sesión

Una sesión del Congreso de Bolivia, en la que el ministro del Interior presentaba un informe sobre el encarcelamiento del gobernador de Santa Cruz, Luis Fernando Camacho, derivó en una batalla campal.

Todo comenzó el martes a la noche cuando la Asamblea Legislativa Plurinacional de Bolivia abrió la sesión pública para recibir al ministro de Gobierno Interior, Eduardo del Castillo. El funcionario estaba citado para responder 11 preguntas presentadas previamente por el parlamento vinculadas a la detención de Luis Fernando Camacho.

La jornada ya era tensa por la sensibilidad del tema a tratar, pero la tensión no tardó en escalar. Mientras del Castillo defendía la prisión de quien es uno de los principales opositores al gobierno de Luis Arce, un grupo de legisladoras de Creemos se acercó al estrado con pancartas en defensa de Camacho. “Ministro del Terror”, “Con presos políticos no hay democracia”, eran algunas de las consignas.

Legisladoras del oficialismo intentaron frenar esa manifestación para continuar con la sesión y eso desató la riña. A lo largo de unos pocos minutos, hubo insultos, tiradas de pelo, patadas y golpes de puño en medio de gritos, cánticos y abucheos.

Esta situación obligó a suspender el informe que se reanudaría horas después. La diputada de Creemos, María René Álvarez, culpó al ministro de haber promovido el clima de beligerancia. Entre otras cosas, del Castillo había hablado de los opositores como “grupos radicales, ladrones, violentos que vinieron a robar la billetera del pueblo boliviano”.

Mientras tanto, el gobernador de la región de Santa Cruz sigue detenido en el penal de Chonchocoro. Luis Camacho está acusado de haber participado en una conspiración que obligó a Evo Morales a renunciar a la presidencia en 2019. En diciembre de 2022, la Fiscalía a cargo de la investigación pidió 6 meses de prisión preventiva que son los que actualmente está cumpliendo.