El proceso de evacuación se suma a otras órdenes semejantes dictaminadas en el condado de Miami-Dade y emitidas tras el derrumbe de edificio Champlain Towers South el pasado 24 de junio.
El condado de Miami-Dade no ha sido el mismo desde que el pasado 24 de junio, el condominio Champlain Towers South en Surfside se derrumbara dejando un saldo de 98 muertos. Seis semanas más tarde, cientos de residentes de un edificio de ocho pisos en Miami recibieron la orden de evacuación luego de que las autoridades lo calificaran como "inseguro".
Los habitantes de los 137 departamentos recibieron una notificación el lunes por la noche e inmediatamente debieron empacar y abandonar la construcción, que debía quedar desocupada en la mañana de este martes.
La orden surgió luego de que el 26 de julio, funcionarios locales se reunieron con los residentes para abordar la condición de la estructura, la cual figuraba en una lista de edificaciones "inseguras" hecha por las autoridades en el mes de mayo. Al día siguiente, tras una inspección, el garaje debió ser clausurado debido a problemas en la estructura, informó el diario Miami Herald.
A pesar de no haber suministrado un plan para solucionar los fallos ni solicitar permisos para acometer obras, los funcionarios locales recibieron la semana pasada una notificación en la que fueron informados de que el edificio era seguro para habitar en vista de las reparaciones que se efectuaban.
Sin embargo, una inspección llevada a cabo este lunes determinó que dichas reparaciones "no eran adecuadas" para el refuerzo de las columnas y ordenaron la evacuación del edificio.
"La integridad estructural ha sido degradada por el contratista que procedió con reparaciones para las que no estaba autorizado", señaló Asael Marrero, funcionario de la ciudad de Miami, al canal local NBC Miami.
La junta de propietarios había recibido una notificación el pasado 7 de julio por varias incumplimientos de la normativa, y tampoco había efectuado el obligatorio proceso de recertificación al ser una estructura de más de 40 años de antigüedad.
"Si este edificio es demolido, se irá nuestra propiedad y todos nuestros recuerdos de haber crecido aquí", expresó al canal local WSVN la residente Mya Ncastanedo. Mientras tanto, las autoridades locales están colaborando con los residentes para que encuentren algún albergue temporal.