El Presidente señaló que están analizando lo que ocurre en la provincia del Norte, tras las protestas por el regreso a la Fase 1.
Durante la jornada de ayer, el Presidente de la Nación, Alberto Fernández, aseguró que al Gobierno nacional le genera preocupación la “violencia institucional”, luego de las protestas del viernes pasado en la ciudad de Formosa en el marco de la vuelta a la Fase 1 del Aislamiento Social, Preventivo y Obligatorio (ASPO).
“Nos preocupa la violencia institucional, lo estamos analizando”, señaló el mandatario nacional al ser consultado por la prensa mendocina acerca de lo ocurrido en la ciudad de Formosa, luego de haber participado del desayuno de la Corporación Vitivinícola Argentina (Coviar).
Cabe recordar que, como informó este multimedio en su edición de ayer, el viernes se registraron protestas en la capital de la provincia en contra del regreso al ASPO.
Lo sucedido en Formosa también tuvo repercusión en la Comisión Ejecutiva de la Conferencia Episcopal Argentina (CEA). Así lo expresó la comisión que encabeza el obispo de San Isidro, monseñor Oscar Ojea, en una carta enviada en las últimas horas al obispo de Formosa, monseñor José Vicente Conejero Gallego, difundida a la prensa. “Querido hermano: en nombre de los obispos de Argentina, queremos hacerte llegar nuestro mensaje de cercanía fraterna y de solidaridad con la situación que está viviendo el pueblo de Formosa. Compartimos tu preocupación de pastor de esa querida provincia”, comienza el texto.
A continuación, los obispos señalan que “es preciso adoptar todas las medidas sanitarias que sean necesarias para combatir la Covid-19, dentro de la razonabilidad y conforme al contexto de su circulación, pero de ninguna manera puede aceptarse el ejercicio de cualquier forma de represión violenta contra ciudadanos que reclaman por la plena vigencia de sus derechos humanos y sociales”.
“Seguramente no faltarán caminos para que la Iglesia, junto a otros sectores de la sociedad, impulsen el diálogo y la amistad social que alejen definitivamente cualquier forma de prepotencia personal o institucional, propias de otros tiempos trágicos de nuestra patria”, agregaron.
El acto en Mendoza
Fernández participó ayer en Mendoza de un acto organizado por la Corporación Vitivinícola Argentina, en el cual se presentó la actualización del Plan Estratégico Argentina Vitivinícola 2030, además de firmarse una serie de convenios para el desarrollo y la promoción de este sector.
“Hoy somos el quinto país más importante en producción de vino industrializado”, detalló el jefe de Estado, quien agregó: “Hace 18 años, cuando Néstor (Kirchner) era presidente, llevamos adelante el primer Plan Estratégico para la Vitivinicultura, convencidos de que la Argentina tiene un potencial enorme para desarrollar”.
El Presidente asintió en que “la actividad de la vitivinicultura sea el tercer proyecto de ley que enviemos al Congreso nacional en esa mesa de concertación en la que tenemos que estar todos”.
Suárez pidió “poner fin a las desavenencias argentinas”
El gobernador de Mendoza, Rodolfo Suárez, participó del tradicional desayuno que organiza la Corporación Vitivinícola Argentina (Coviar) junto al Presidente Alberto Fernández y, en ese marco, pidió “poner fin a las desavenencias argentinas” e “ir por los beneficios que solo la unidad puede proveer”.
El gobernador dijo que “desde el último encuentro ha transcurrido un año de características excepcionales”, en alusión a la pandemia de coronavirus, y por eso agradeció “lo hecho por todos los que levantaron nuestra cosecha y nuestra industria más representativa para seguir adelante a pesar de las dificultades, principalmente a los trabajadores”.
Suárez también señaló que “todavía nos quedan muchos días de combate contra la pandemia” y afirmó que “no solo por el comportamiento errático del virus y los tiempos que demandarán los procesos de mitigación tales como la vacunación, sino también por las dramáticas consecuencias sociales que viene dejando a su paso, fundamentalmente en términos de empleo”.
En otra parte de su discurso, Suárez recordó sus dichos en la presentación del Consejo Económico, Ambiental y Social de Mendoza, donde había afirmado que “los argentinos y las argentinas conocemos ya los dolores profundos que pueden producir las grietas; es hora de ir por los beneficios que solo la unidad puede proveer para que podamos tener un programa de desarrollo que sea sostenido en el tiempo”.