El histórico edificio sufrió no solo el deterioro de los años sino también el abandono de la gestión de María Eugenia Vidal. Ahora, el gobernador Axel Kicillof invierte para recuperar el esplendor perdido.
aL Casa de Gobierno de la provincia de Buenos Aires, emplazada en la manzana rodeada por las calles 5, 6, 51 y 53, atraviesa un proceso de restauración del patrimonio arquitectónico, luego de años de un deterioro que se vio profundizado en los cuatro de la gestión de María
Eugenia Vidal, quien no utilizó la residencia en la capital bonaerense sino que eligió “mudarse” para cumplir sus funciones desde la Base Áerea de Morón.
Axel Kicillof, apenas asumió al frente del Ejecutivo, anunció que residiría con su familia en la Residencia del gobernador, situada sobre calle 5, y posteriormente anunció la puesta en marcha de un plan para rescatar el histórico edificio del deterioro.
En ese marco, la Secretaría General de Gobierno que encabeza Federico Thea es la encargada de llevar adelante el proyecto integral que le devolverá al edificio su histórica impronta neo-renacentista.
“Es uno de los grandes proyectos que estamos llevando adelante desde la Secretaría con las refacciones en Casa de Gobierno. Hay que decir que la Casa de Gobierno además es patrimonio nacional y por lo tanto cualquier intervención es compleja con los cuidados que hay que tener”, explicó Thea a diario Hoy.
En ese sentido, el funcionario apuntó: “Cuando llegamos estaba abandonada y derruida; no solo por el paso del tiempo, sino por la no ocupación: cuando no está la gobernadora, no están los ministros, no hay actividades... y por lo tanto se la dejó estar mucho”.
“El uso del Salón Dorado que hacemos ahora es realmente intenso y todo requiere una puesta en valor mientras se lo utiliza, y eso no es sencillo”, remarcó el funcionario.
Cabe mencionar que justamente es la sala más destacada del edificio, de 11 por 24 metros, cuya decoración barroca estuvo a cargo de Augusto Ballerini, en 1900. El piso es de roble de Eslavonia, en los laterales y extremos del techo se observan figuras alegóricas que portan la Balanza de la Justicia; la Rueda de la Industria; el Libro de la Educación. Más abajo, están los retratos de catorce próceres, destacándose en la cabecera José de San Martín, Manuel Belgrano y, hacia los laterales, Domingo Faustino Sarmiento, entre otros. En el friso, de 4 por 12 metros, se destacan los tres poderes públicos, como así también pequeños ángeles portando una cinta con la inscripción con la fecha de fundación de La Plata, en números romanos.
Por otro lado y en sintonía con la necesidad de recuperar el patrimonio del Estado, Thea contó: “También recuperamos la Imprenta de la Provincia que estaba en situación de indiferencia y el no aprovechamiento de las capacidades que tiene, los galpones con goteras en los techos que perjudicaban las máquinas, y trabajamos con Astillero Río Santiago para hacer la obra del techo y ponerla en funciones. De hecho toda la folletería de la campaña de vacunación se hizo desde la imprenta estatal, no hubo que tercerizar nada”.
Asimismo en los últimos días se observaron avances en los trabajos que se vienen realizando en las cúpulas sobre calle 6 y las cubiertas planas de chapas galvanizadas en el interior del edificio de la Casa de Gobierno.
Un edificio con historia
El edificio de la Casa de Gobierno bonaerense tiene un estilo neo-renacentista de influencia flamenca, y sus fachadas se caracterizan por la combinación de paños de ladrillo a la vista, con partes revocadas en Piedra París. Consta de dos plantas y mansarda; hacia Plaza San Martín está la Portada Monumental de triple arco romano, sobre la cual se levanta un pórtico de cuatro pares de columnas que cierran el balcón cubierto, e inicialmente sostenían un pequeño torreón central con cúpula, que luego fue demolido.
En la misma manzana, pero con frente a calle 5, se encuentra la Residencia del gobernador, finalizada en 1911. Su primer ocupante fue el gobernador José Inocencio Arias, en 1912. Originalmente el estilo era también neo-renacentista flamenco, pero en 1938, durante el gobierno del Dr. Manuel Fresco, se le encargó al arquitecto Alejandro Bustillo una remodelación total que dio a la Residencia la expresión clásica francesa que muestra actualmente.