Cada vez son más los candidatos en carrera para la Cancillería argentina

Tic-tac, tic-tac, el reloj corre y el tiempo de Felipe Solá al frente de la Cancillería argentina va llegando a su fin luego del garrafal error que cometió hace una semana, cuando a través de un lamentable tuit le advirtió al recién asumido mandatario de los Estados Unidos que “no se apueste a la desunión como en la etapa anterior”.

“Felicitamos al pueblo de EE. UU., al presidente @JoeBiden y a la vicepresidenta @KamalaHarris. Argentina desea fortalecer las relaciones y que se respete a los organismos multilaterales. Espera también que no se apueste a la desunión de nuestras naciones como en la etapa anterior”, fue el mensaje del por entonces y aún canciller argentino, que eligió una muy mala frase para expresar su “beneplácito” ante la asunción del mandatario norteamericano.

A quien no le causó gracia el tuit fue al Presidente Alberto Fernández, que, tras su regreso de La Rioja a ­Olivos, y mientras se aprestaba a escribir una carta personal a Biden para describir su optimismo respecto de las posibles relaciones bilaterales entre la Casa Rosada y la Casa Blanca, ­recibió el comunicado de la Cancillería posteado en la cuenta ­oficial de Twitter y su humor ­cambió.

Las averiguaciones para tratar de saber por qué se había escrito esa ­desafortunada frase no tuvieron eco y la tensa relación entre el Presidente y el exgobernador llegó a un punto de tensión máximo.

Finalmente, Alberto Fernández escribió su carta y para ello utilizó un dato de un informe reservado que hizo Gustavo Béliz sobre la trayectoria política del 46° presidente de los Estados Unidos, que le recordó que Biden había viajado “más de treinta veces” a América Latina, lo que motivó este párrafo en la esquela: “Lo sé conocedor en cuerpo y alma de la realidad de América Latina, y su experiencia y sensibilidad serán también muy importantes para nuestra región, asediada como usted conoce por múltiples desafíos de inequidad, violencia y endeudamiento insostenible”.

Este detalle ubicó al secretario de Asuntos Estratégicos en la carrera de sucesión del exmandatario provincial, aunque, según pudo saber este multimedio, “desde la Rosada descartan que Béliz vaya a ocupar el lugar que más temprano que tarde dejará vacío Solá”.

Por otra parte, desde la vicepresidencia también postulan reemplazantes, y Cristina Fernández pretende ubicar en ese lugar al sociólogo Jorge Taiana, quien ya se desempeñó en ese cargo desde la salida de Rafael Bielsa, en diciembre de 2005, hasta su renuncia en junio de 2010.

Pero el Presidente tendrá otros planes, y querría que Jorge Argüello, el actual embajador ante los Estados Unidos, ocupara ese lugar. En ese caso, el también candidato Gustavo Béliz pasaría a ocupar su lugar en la embajada de Estados Unidos.

Pero la fila no termina allí, ya que alguien desde el fondo viene pidiendo pista. Aunque parezca poco creíble, en esta puja de nombres se coló uno impensado, y no es otro que Daniel Scioli, un “tapado” que cuenta con apoyo y que podría dar el salto.
En términos de turf platense, ya doblaron “el codo de Tolosa” y están en los últimos 400 metros. Veremos quién cruza el disco para ubicarse donde todavía está Felipe Solá.