Comenzó la etapa de alegatos por el asesinato de un militante en la dictadura

Se trata del caso de Horacio Benavides.

En la jornada de ayer se dio inicio a los alegatos ante el Tribunal Oral Federal (TOF) 2 de La Plata sobre el caso que investiga el crimen del militante peronista Horacio “Chupete” Benavides, durante la última dictadura cívico-militar.

Benavides era un militante de la Juventud Universitaria Peronista (JUP) que estudiaba en la Facultad de Derecho de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP), donde además fue compañero de los expresidentes Néstor Kirchner y Cristina Fernández de Kirchner.

El joven de 22 años fue asesinado el 30 de septiembre del año 1976, y por el crimen se encuentran imputados los expolicías de la provincia de Buenos Aires Walter Omar Ale y Juan Nazareno Risso, así como el exministro de Gobierno bonaerense Jaime Lamont Smart.

Por este asesinato los exuniformados fueron ascendidos y felicitados por sus superiores en sus legajos, donde consta que, “ha­ciendo gala de valentía y excelente disposición para con el cumplimiento del servicio, lograron erradicar del seno de la sociedad a individuos de extrema peligrosidad”.

En tanto, el abogado Pablo Llonto, que actúa como querellante en representación de la familia de Benavides, al comenzar su alegato adelantó: “Vamos a pedir la condena de Walter Omar Ale, Juan Nazareno Risso y Jaime Lamont Smart”.

El letrado exhibió una foto de Horacio junto a sus padres y hermanos y afirmó: “Esta es la familia que destruyeron hace 47 años”.

En otro pasaje de su exposición, Llonto aseguró que los implicados “llegaron a Benavides con información obtenida bajo tortura, con esa herramienta maldita que era la picana, las patotas salieron a buscar al blanco, que era Horacio Benavides”, y cerró: “Esa era la cacería de los grupos de tareas que integraban los imputados de esta causa, que en su cúpula tenían a Jaime Lamont Smart”.

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