Hotesur: balances sospechosos y hasta un préstamo a Kirchner

En uno de los cuatro hoteles de los Kirchner al que la Justicia investiga para saber si fue usado para lavar dinero de la corrupción (el Alto Calafate), en el único balance contable entregado a un organismo estatal fue el que correspondía al ejercicio financiero de su hotel durante el 2009, da indicios de maniobras sospechosas, como un préstamo por $ 4.624.879,45 que la firma le cedió como “crédito” al accionista mayoritario, el entonces ex presidente Néstor Kirchner, según publicó hoy Clarín.

Esa cifra, además, no corresponde con los bienes que Cristina Kirchner registró ante la oficina anticorrupción (OA).

En su declaración jurada de 2009, CFK seguró que la deuda que su “cónyuge” tenía con el Alto Calafate ascendía a $ 5.542.779. Entre el crédito que recibió Néstor y esa cifra que figura en la OA hay una diferencia de $ 917,900.

A eso se suma que el ejercicio contable del Alto Calafate del 2009 asegura que la empresa obtuvo ese año$ 2.007.703,66 de ganancias. Kirchner había comprado el hotel un año antes. En el 2008, los dueños anteriores del negocio, empresarios experimentados en el mercado del turismo, habían ganado $ 469.868,88.

Kirchner logró aumentar la cifra en más de $ 1,5 millón. Eso, siempre según los balances firmados por el auditor “fantasma”, que a su vez fueron aprobados por el ex presidente, y por su hijo, en asambleas realizadas en el 2010 mal confeccionadas: sus actas ni siquiera registran en qué sede de la empresa se realizaron.

Sólo tres días después de comprar el Alto Calafate, el ex presidente le alquiló el negocio a su socio Lázaro Báez, contratista de la millonario obra pública que financiaba el Presupuesto Nacional. Hasta el 2013, Báez les pagó a los K alrededor de 5 millones de pesos por el alquiler anual del Alto Calafate.

Desde agosto del 2013, quien renta el hotel es la empresa Idea S.A, del socio K Osvaldo Sanfelice: paga por la misma locación 800 mil pesos por año. Entre un contrato y alquiler y otro la Justicia de Argentina y de varios países inició investigaciones por lavado sobre Báez, socio de los Kirchner.