Inflación: salarios en rojo

La inflación está generando 645 nuevos pobres por hora y un fuerte deterioro de los salarios.  En este marco, los trabajadores estatales esta semana paralizarán a la Provincia. El jueves habrá una movilización multitudinaria convocada por la mayoría de los gremios

El avance de la inflación y los acotados ajustes salariales generaron una tensa situación en la provincia de Buenos Aires entre los sindicatos y el gobierno de María Eugenia Vidal, por lo que esta semana habrá más paros, asambleas y una movilización que fue calificada como “histórica”, ya que participarán docentes, auxiliares, estatales de la administración central, judiciales, médicos, policías, bancarios, trabajadores del Astillero, productores rurales y sectores estudiantiles.

El reclamo de los distintos espacios tiene un denominador común: la incomprensible insensibilidad y falta de respuestas de la administración de Vidal.

Con un alza constante de los precios de la canasta familiar y el combustible más los tarifazos en los servicios públicos, la inflación en el primer cuatrimestre de este año fue de un 20 por ciento, y si sumamos el incremento acelerado que tuvo ese flagelo en el último trimestre de 2015, luego de que los trabajadores recibieron la última recomposición salarial, la situación es alarmante y preocupante. De hecho, los asalariados perdieron 10 puntos del salario real entre agosto y marzo pasado.

Al respecto, el titular de Consumidores Libres, Héctor Polino, en diálogo con Hoy explicó que “hay que tener en cuenta el informe de la Universidad Católica Argentina (UCA), que señaló que los niveles de pobreza pasaron del 29% al 34,5%, desde fines de diciembre de 2015 a fines de marzo de 2016. Es decir que hay 1,4 millones de nuevos pobres, un promedio de 15.500 nuevos pobres por día, (646 por hora) y 350 mil nuevos indigentes, solo en ese período. Pero el deterioro continuó desde marzo hasta hoy, por lo que puede concluirse que el aumento de la pobreza e indigencia es aún mucho mayor. La realidad es que tenemos salarios viejos, congelados, frente a un extraordinario  aumento de precios”.

En este contexto es que crecen los reclamos a la gobernadora Vidal para que reaccione y otorgue un incremento salarial que al menos equipare al avance inflacionario, el que aniquila el poder adquisitivo y cada jornada que pasa deja a centenares de bonaerenses por debajo del índice de nivel de pobreza.

 La situación ha provocado que se vean paralizados varios servicios fundamentales como la educación, la salud y la justicia, y que se vivieran situaciones límites con amenazas de retenciones de tareas de integrantes de las fuerzas de seguridad: Policía y Servicio Penitenciario.

Por eso los gremios más importantes de la Provincia acordaron realizar una contundente demostración de fuerza y unidad, y se movilizarán juntos este jueves, que se complementará con distintos paros.

Hace 14 años que en la Provincia no se producía una situación similar donde dirigentes sindicales, con distintas concepciones políticas e ideológicas, decidieron dejar de lado años de diferencias para luchar contra el ajuste.

Los representantes gremiales adelantaron que las protestas se efectuarán  contra el ajuste en la provincia de Buenos Aires, en defensa del salario, de la fuente laboral, contra las leyes de Emergencia Administrativa y Modernización Tecnológica y por un Estado al servicio de las mayorías de los bonaerenses.

Un frente multisindical

La medida fue consensuada tras una reunión en la que estuvieron presentes el ingeniero Marcelo Balcedo, secretario general del SOEME; Oscar de Isasi, secretario general de ATE provincia de Buenos Aires; Roberto Baradel, secretario general de SUTEBA; René Cruz, vicepresidente de la FEB; Miguel Díaz, secretario general de UDOCBA;  María Inés Buss, secretaria adjunta del SADOP (docentes privados); Agustín García, secretario gremial de Asociación Judicial Bonaerense (AJB); Francisco Benegas, secretario general de ATE Ensenada (Astillero Río Santiago); Francisco Torres, secretario de organización de la Federación Nacional Docente; Santiago Etchemendi, secretario general de la Comisión Gremial Interna del Banco Provincia (BAPRO); y Nicolás Masi, secretario general del Sindicato Policial Bonaerense (Sipoba).

También participaron Federico Casas, secretario general de la Federación Universitaria de La Plata (FULP); Juan Enrique Cataldo, dirigente de la Asociación de Médicos de la República Argentina; Idelmar Seillant, secretario general del Supttioma; Jorge Goldmann, secretario de organización de AEMOPBA; Sergio Cessini, secretario gremial de AMET; Juan Carlos Berón, secretario general del Sindicato de Choferes de Taxis; y Roberto Solano, presidente de la Asociación de Medieros y Afines (ASOMA).

Médicos y judiciales: 72 horas de paro

En tanto, esta semana los judiciales y los profesionales de la salud volverán a parar durante 72 horas en reclamo de una mejora salarial. Las medidas de fuerza arrancarán mañana y se postergarán hasta el jueves.

La Asociación de Judiciales Bonaerenses (AJB) y la Asociación Sindical de Profesionales de la Saludla CICOP (gremio de los médicos) confirmaron a Hoy que movilizarán el jueves junto al resto de los gremios a la marcha hacia la Legislatura y la Casa de Gobierno. Por su parte, auxiliares del SOEME y estatales de ATE van a realizar una huelga el jueves 19.

“Las medidas tomadas causan un escenario preocupante”

Por Roberto Dvoskin (Economista- Profesor en la Universidad de San Andrés)
Especial para Hoy

El gobierno nacional todavía no ha mostrado su plan antiinflacionario, así que no sé cómo van a bajar la inflación. Hasta ahora todo forma parte de un nuevo relato, que dice que la inflación va a empezar a bajar a partir de junio, en lo que significa una esperanza, que no tiene correlación con la realidad.

Las medidas tomadas son para favorecer a sectores de la población vinculados a los sectores exportadores, dejando de lado al trabajador que se ha visto perjudicado, reduciendo su capacidad de consumo y ajustándose el cinturón a niveles imposibles de sostener.

En la microeconomía las medidas causan un escenario altamente preocupante, paritarias que no se cierran y una inflación ganándole la carrera a los salarios, lo que hace que los que menos tienen estén al margen.

“La verdad es que la gente hace malabares”

Por Sandra González (Titular de la Asociación de Defensa de los Consumidores y Usuarios de la República Argentina (ADECUA)
Especial para Hoy

Lo que más inquieta a la gente es el tema de la comida, el alza generalizada en el precio de los alimentos y de toda la canasta básica.

De un tiempo a esta parte, la población ha cambiado sus hábitos de consumo y las primeras marcas ya dejan de ser una prioridad. Mientras, son pocos los que han tenido aumento de sueldo, y los que lo recibieron sienten que esas mejoras salariales nunca alcanzan a la inflación. La verdad es que la gente hace malabares para llegar a fin de mes, al punto que  optan por financiarse con las tarjetas de crédito y aquellos que ni siquiera están bancarizados han vuelto a la libreta del almacén.

Mucha gente va al supermercado y compra en tres o seis cuotas su compra; esto habla de la situación difícil en la que estamos, con una merma total en las ventas de los supermercados.

“Hay que actualizar los ingresos de la mayoría de la población”

Julio Gambina (Doctor en Economía y Ciencias Sociales)
Especial para Hoy

La inflación anual medida de abril a abril fue de 40,5 por ciento. Y la proyección para este año, partiendo de que durante el primer cuatrimestre fue cercana al 20 por ciento, todo indica que vamos a terminar el 2016 con un alza de precios más cerca del 40 por ciento, que del 25 por ciento que se planteó como meta el Gobierno.

Lo que se debería hacer es actualizar los ingresos de la mayoría de la población a través de los salarios. Sin embargo, las paritarias que se han aprobado hasta ahora han estado muy por debajo. Es decir, las ofertas que están entregando son mínimas, y el conflicto de los estatales en la provincia de Buenos Aires lo están protagonizando muy fuerte sectores que brindan servicios impostergables. Acá hay una demanda de los trabajadores porque los ingresos no le alcanzan al estar disparado el costo de vida.

“La situación económica afecta a los asalariados”

Por Martín Simonetta (Profesor en la Universidad de Ciencias Empresariales y Sociales (UCES)
Especial para Hoy

La inflación es el impuesto al pobre, especialmente de los sectores que tienen bajos e ingresos fijos, que no tienen tanta capacidad de adaptarse a los cambios de los precios, que son los que menos pueden acomodarse a esta situación complicada.

Toda esta situación económica afecta al trabajador y a los salarios y lo que sucede en las negociaciones salariales determina si el asalariado queda arriba o abajo, y por ahora claramente está quedando por debajo de la inflación.

Este descontento hacia el gobierno uno lo ve en varios frentes, y hay un malestar en la gente porque se requiere resultados inmediatos, y lamentablemente hoy los resultados de la política económica brillan por su ausencia.

“Ningún trabajador debe perder frente al alza de precios”

Por Pablo Garate (Diputado provincial por el Frente Renovador)
Especial para Hoy

Con respecto a la paritaria estatal de la Provincia, yo creo que el porcentaje de aumento ha sido demasiado alejado de la realidad inflacionaria de esta etapa, e incluso la manera irregular en que se cerró amerita un esfuerzo y un entendimiento del Gobierno Provincial de reabrirla. Ningún trabajador debe perder frente al alza de precios.

Está claro que este semestre es de alta inflación y tarifazos, y esto hace que los trabajadores pierdan poder adquisitivo si la negociación paritaria no está basada en la realidad que vivimos.

Me parece que una decisión correcta sería reabrir la paritaria, para recuperar cierta paz social y el funcionamiento normal de servicios del estado provincial, que hoy se ven afectados por las medidas de fuerza gremiales.

Asimismo, recuperar el diálogo y sentarse en una misma mesa, va a hacer que se pueda avanzar en una etapa de reformulación del empleo público basada en la capacitación, la dignidad, la eficiencia, el reconocimiento salarial, y la cultura del sacrificio, porque los trabajadores son la parte más importante de un Estado que responda a los vecinos de la Provincia. Pero para que estos enunciados se cumplan debemos trabajar en el equilibrio de valorar a los que trabajan y cumplen , y terminar con los que la política los puso y no cumplen porque en definitiva desprestigian a los verdaderos trabajadores.

“Vivimos un momento muy complicado”

Por Camilo Tiscornia (Economista. Profesor en la Universidad Católica Argentina (UCA)
Especial para Hoy

En estos meses hemos visto un fuerte golpe para el bolsillo de los argentinos, más que nada por el ajuste implementado por el gobierno, que pegó de lleno en la capacidad de consumo de la gente, como los tarifazos por ejemplo.

Vivimos un momento complicado, donde estamos atravesando un período en el cual la inflación se va a mantener alta por un buen tiempo, donde los precios de la canasta básica de alimentos siguen aumentando sostenidamente

Los salarios están siendo muy castigados, va a tener que haber ajustes paritarios y no como los que se han venido acordando hasta ahora, de eso no cabe ninguna duda. El gobierno debe estar muy atento para contener los reclamos sociales que seguramente saldrán por las medidas que se han llevado adelante.

“La situación social ha empeorado”

Daniel Arroyo (Exministro de Desarrollo Social de la provincia de Buenos Aires)
Especial para Hoy

Lo que está claro en la provincia de Buenos Aires es que la situación social ha empeorado. Han pasado tres cosas juntas. Por un lado la inflación: primero con el aumento de precios, después con las tarifas y con el transporte. Por otro lado las dificultades en el mercado laboral con más de 140 mil despidos entre el sector público y el sector privado. Y después con el parate de la construcción, que es el parate de las changas.

En este escenario los asalariados formales son los que tienen más capacidad de discutirle al gobierno, y entiendo que va a haber conflicto por mucho tiempo. Porque objetivamente hay una tensión entre el ajuste, la inflación y la discusión salarial.

Sabemos que la gobernadora María Eugenia Vidal ha tomado una provincia muy complicada en sus finanzas, pero con el nuevo Presupuesto las cosas deberían haber mejorado.