Sería una maniobra para hacerse con los activos de la empresa del grupo Indalo a un precio más barato.
La justicia investiga una sospechosa maniobra donde el gobierno de Mauricio Macri habría utilizado a YPF, la petrolera estatal, como un “eslabón más en la maniobra delictiva” para hostigar a Oil Combustibles y comprar sus activos a un precio más bajo. La sospecha surge a partir de la denuncia de los abogados del empresario Fabián De Sousa y se sostiene en una serie de llamadas telefónicas de los imputados.
La jueza María Servini pidió la identificación de quienes se comunicaron con los directivos de la empresa Oil Combustibles. Se puso la lupa principalmente en los exfuncionarios macristas Fabián “Pepín” Rodríguez Simón (que fue el director de YPF), Miguel Gutiérrez, exasesor de la firma y Mariano Rufino.
Rufino permanece prófugo en Uruguay, tomó pare de forma directa en el proceso de compra de activos para esapoderar a Oil Combustibles.
Es por eso que la jueza pidió “a la mayor brevedad posible, acompañe todas las constancias que den cuenta de la contratación de Marcelo Rufino por parte de la empresa, tales como facturas de cobro de honorarios, y toda otra documentación que permita ilustrar respecto de los servicios prestados por el nombrado, tareas encomendadas y órdenes que le fueran impartidas”, además de toda la documentación sobre la adquisición de la red de estaciones de Oil.