El gobierno bonaerense impulsa la asistencia alimentaria a establecimientos que brindan el servicio
a la comunidad, en distintos municipios, tras la cancelación
de las partidas presupuestarias por parte de Nación.
La iniciativa llevada a cabo por la provincia de Buenos Aires surge a partir de la decisión del Gobierno nacional de anular, desde el 10 de diciembre, el envío presupuestario para el Módulo Extraordinario para la Seguridad Argentina (MESA), un programa bonaerense pero que contaba con la asistencia del Ministerio de Desarrollo Social.
A través de la cartera de Desarrollo de la Comunidad bonaerense, a cargo de Andrés “Cuervo” Larroque, la gestión de Axel Kicillof comenzó a asistir a los comedores y merenderos de los distintos municipios con el objetivo de “sostener y reforzar” la ayuda, al tiempo que manifestaron que la partida presupuestaria que destina la Provincia se debió incrementar por la “falta de asistencia del Ministerio de Capital Humano”.
Además de la situación que aqueja a los establecimientos a causa de la reducción en las partidas, desde gobernación aseveraron que se suma la situación económica producto de las medidas que lleva a cabo el Presidente de la Nación, Javier Milei. Por este motivo, en el primer trimestre del año, Kicillof destinará más de 36.000 millones de pesos en ayuda alimentaria y, según lo mencionado desde la Provincia, en el mes de diciembre se realizó una doble entrega correspondiente a los meses de diciembre y enero.
A partir de esto, afirmaron desde la administración bonaerense: “Lo que estamos haciendo es adelantar a los municipios lo que ya estaba establecido para contener la situación más emergente. El refuerzo es para compensar lo que no llega de Nación”.
Cabe mencionar que, el pasado jueves, el mandatario provincial mantuvo un encuentro con intendentes bonaerenses donde informaron al gobernador que el caudal de personas que acuden a los comedores y merenderos aumentó de manera considerable.
Es importante destacar que el programa MESA alcanza a más de dos millones de familias de niños, niñas y adolescentes que asisten a los 11.000 comedores escolares que funcionan en los establecimientos educativos incluidos en el Servicio Alimentario Escolar (SAE).