El Gobierno nacional señaló que cada gobernador decide “si adhiere o no”. Hoy habrá marchas de movimientos sociales.
El gobierno de la Provincia de Buenos Aires anunció que no aplicará el protocolo antipiquetes anunciado por la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, por considerar que criminaliza la protesta.
“Sé que hay contactos entre nuestro ministro de Seguridad y el de la Nación, como corresponde, son contactos institucionales y operativos. A nosotros no nos han solicitado que apliquemos el protocolo, no vamos a aplicarlo porque no estamos de acuerdo con las disposiciones de ese protocolo, que entre otras cosas creo que criminalizan la protesta”, confirmó ayer el jefe de Gobierno bonaerense, Carlos Bianco.
El ministro consideró que la movilización “obviamente que tiene que ser con cierto orden”, pero criticó el protocolo anunciado por la ministra de Seguridad al señalar que “lo que se ha hecho sobrepasa un límite que hemos tenido durante todos estos años de democracia”.
En el mismo sentido, señaló que hay “cuestiones de reconocimiento facial” y otros ejes de la propuesta “que hay que ver si están validadas en el marco de la normativa legal”. “Son cosas que habrá que analizar”, expresó.
“Ninguno hace una protesta si no tiene una necesidad, después hay muchas cuestiones para discutir, pero cuando me refiero al cierto orden es que el miércoles no se produzcan desmanes”, agregó al ser consultado sobre las movilizaciones convocadas para hoy por movimientos de izquierda.
Tras el anuncio de Bianco, el vocero presidencial, Manuel Adorni, aclaró que “cada gobernador o el jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires será responsable por el acatamiento o no del protocolo”. “Nuestra prioridad es que el que quiera circular, circule. Si esa no es la prioridad del Gobierno provincial, y por eso no acata el protocolo”, enfatizó el funcionario en su habitual rueda de prensa matutina y agregó: “Nosotros entendemos que primero está el cumplimiento de la ley y primero está el derecho de la gente a circular”.
“La decisión está tomada y será hacer cumplir la ley. Los detalles del plan no se dan por cuestiones de seguridad, pero la decisión es clara: permitir la libre circulación, y está claro que cada una de las medidas que se están tomando están en línea con la disuasión previa”, ahondó el vocero presidencial.