Trenes: otro chiste de mal gusto de Randazzo

Anoche, en el programa Periodismo para Todos, mostraron imágenes de las cabinas de trenes del ferrocarril Roca, que llegan a nuestra ciudad, con gruesas falencias al punto que se estaban inundando con agua de lluvia. Eso no es todo: también se pudo ver como los GPS instalados, que supuestamente deberían constituir un mecanismo de control, no funcionaban.

Mientras los trenes se caen a pedazos, y como si fuese un chiste de mal gusto, la semana pasada el Ministerio del Interior y Transporte, Florencio Randazzo, más conocido como el “hombre de la eterna sonrisa”, informó con bombos y platillos que se comenzó a instalar el servicio de internet inalámbrica (wifi) gratuito en las estaciones del ferrocarril del área metropolitana. 

Randazzo explicó que "la infraestructura para el servicio se está terminando de instalar en toda la línea Sarmiento –operada por el Estado Nacional- en su ramal Once-Moreno, y ya está activo en once de las 16 estaciones de la traza". 

En otras palabras, a diferencia de otras ocasiones, es muy probable que el próximo tren que choque tenga acceso a Internet.

En momentos en que se anunciaba esta verdadera falta de respeto a los usuarios, se conocía que un tren del Belgrano Cargas descarriló a la altura de un asentamiento de Rosario. Cuatro vagones cayeron sobre viviendas precarias y una familia salvó su vida "de milagro". El descarrilamiento del tren, cargado de maíz y azúcar, no provocó heridos, pero sí la reacción de los vecinos. 

Fuentes ferroviarias atribuyeron el accidente "al deterioro, abandono y falta de inversión en los rieles" y negaron que el descarrilamiento haya sido provocado para robar la mercadería.