Usuarios comienzan a sufrir el tarifazo de ABSA

Vecinos de distintos barrios empezaron a recibir las facturas con incrementos que oscilan entre el 140% y 500%; los mismos deberán ser abonados en los primeros días de junio. La empresa todavía debe responder por un fallo judicial que la obligó a pagar $1.800 millones. La desinversión y la ineficiencia del servicio, en el ojo de la tormenta

En medio de la ola inflacionaria, los últimos días de mayo golpean con un nuevo tarifazo a los 14 millones de bonaerenses, que ya comenzaron a recibir las boletas emitidas por la cuestionada empresa Aguas Bonaerenses S.A. (ABSA), con incrementos que oscilan entre el 100% y el 500%, según el nuevo cuadro tarifario autorizado por la gobernadora María Eugenia Vidal.

Así, por ejemplo, vecinos del barrio La Loma que el mes pasado abonaban menos de $332,22, ahora deberán afrontar un gasto de $797,90, es decir, con una suba de más del 140%. En tanto que, otro del bario Cementerio, que antes pagaba $189, ahora deberá desembolsar $500, lo que representa un alza de más del 164%.

De esta manera, ABSA apuró los incrementos, pese a que, según el decreto 409/16 publicado en el Boletín Oficial del gobierno bonaerense, el ajuste debía comenzar a regir desde el 1º de junio, con lo cual, el impacto debería haberse reflejado recién en las boletas de julio.

Otro punto a tener en cuenta es que las subas se dan en un contexto plagado de vicios: desoyendo el fallo del Juez en lo Contencioso Administrativo de La Plata, Luis Federico Arias, que determinó que la prestataria del servicio debía devolver a los usuarios el dinero cobrado ilegalmente en el año 2012, a partir de un aumento tarifario del 180% y por el que la Corte Suprema de la Nación obligó al gobierno de la Provincia a devolver aproximadamente $1800 millones; siendo indiferente a las denuncias de referentes políticos y consumidores, aquejados por la falta de inversión, las fallas de un servicio ineficiente y la distribución de “agua no apta para consumo humano”, pese a los reiterados aumentos.

El nuevo cuadro tarifario

Sin escuchar los reclamos de los usuarios, la Provincia optó por profundizar la pésima gestión heredada, premiando a los responsables del saqueo de una empresa que no invierte para distribuir en forma óptima uno de los derechos humanos por excelencia.

Así, se dispuso un aumento del 140% en las tarifas del servicio de agua potable y cloacas, estableciendo el nuevo valor del m3 en 5,74 pesos contra los 2,39 pesos actuales. Debido a la unificación dispuesta en los rangos de consumo del 1 al 4 en una única categoría a la que le asignan un valor de 19 módulos por mes, el incremento en ese caso será del 470%. En tanto, para la categoría 8 -propiedades con una valuación fiscal de hasta 150 mil pesos-, se asignarán 39 módulos y pasará de pagar los 186,20 pesos actuales a 447,41 pesos por mes.

Hay que tener en cuenta que, además de afectar a los usuarios residenciales, el tarifazo impacta fuertemente en las Pymes y pequeños comerciantes como los panaderos, quienes la semana pasada, producto de estas subas, analizaron llevar el kilo de pan a los $40. Entonces, uno de los afectados reclamó por una obviedad que ni la empresa ni la gobernadora parecen advertir: “El agua es un derecho humano que no debe tener color
político”.