Albañiles golpearon a un vecino que se quejó del ruido

En un incidente alarmante, un grupo de cinco albañiles atacó brutalmente a un vecino en la intersección de las calles 40 y 121, en el barrio Hipódromo. El ataque ocurrió cuando el vecino se acercó a la casa contigua para pedir que cesaran los ruidos molestos que interrumpían su tranquilidad matutina.

Según el relato del denunciante, los albañiles que trabajaban en la casa reaccionaron de manera violenta ante su solicitud. En lugar de atender a su petición, los trabajadores respondieron con agresiones físicas, propinándole golpes en el rostro y amenazándolo de muerte. Uno de los agresores incluso empuñaba un arma blanca durante el altercado.

El ataque fue captado por una cámara de vigilancia del barrio, donde se puede ver cómo los cinco hombres agreden al vecino hasta derribarlo. Una vez en el suelo, continuaron golpeándolo con patadas en la cabeza y la espalda.

Como resultado de la paliza, el hombre perdió el conocimiento durante unos minutos y tuvo que recibir asistencia médica. Afortunadamente, se constató que estaba fuera de peligro tras el incidente.

El caso ahora se investiga como “lesiones y amenazas agravadas” y tanto la Unidad Fiscal de Investigación N° 5, que impartió directivas, y la comisaría Segunda, con jurisdicción en la zona, han tomado intervención en el caso. Se espera que los responsables sean llevados ante la justicia por sus acciones violentas injustificadas.

Atacan a la empleada de un almacén

En un incidente preocupante, dos falsos clientes llevaron a cabo un robo en un almacén ubicado en Camino General Belgrano y 488, en la zona de Gonnet. El hecho ocurrió el pasado jueves por la noche, cuando una joven de 20 años estaba a cargo de la atención al público.

Según la denuncia presentada en la seccional Décima, los dos individuos que la asaltaron llegaron a la línea de caja con dos botellas de champagne nacional y algunos chocolates. Sin embargo, cuando llegó el momento de pagar, revelaron sus verdaderas intenciones.

Bajo amenaza con un arma de fuego, la empleada del comercio no tuvo más opción que acatar las órdenes de los ladrones. A pesar de no ofrecer resistencia, recibió un golpe en el rostro.

Los asaltantes no solo se llevaron las botellas de champagne y los chocolates, sino también la recaudación del día, que ascendía a unos 50.000 pesos, un teléfono celular y un cartón de cigarrillos.