Le dieron 18 años de prisión a un hombre que abusó de sus hijastros

Producto de la agresión, uno de los niños murió. Tanto la madre del menor como el imputado habían sido sobreseídos en la etapa de investigación

Usted es un monstruo”, le espetó la fiscal de juicio Laura Lasarte a Jorge Oscar Sosa (33), quien ayer fue condenado por el Tribunal Oral en lo Criminal nº 4 de La Plata a 18 años de prisión por violar a dos de sus hijastros menores de edad, en una vivienda de la localidad bonaerense de Alejandro Korn en 2010.

En su voto, el juez Emir Caputo Tártara relató los padecimientos que vivieron las víctimas, una nena de 9 años y un nene de 4. 

Según contó la hermana mayor de los niños, su madre conoció al imputado hace siete años y lo llevó a vivir con ella. La joven contó que ella se opuso porque una pareja anterior de su progenitora la había violado y no quería volver a pasar por la misma situación. Esto provocó una disputa que generó que la mujer echara a la adolescente de la casa, quien con tan solo doce años de edad comenzó a vivir en la calle y luego en Capital. 

Pasó el tiempo, la adolescente hizo su vida, y, estando embarazada de seis meses de su actual pareja, fue a visitar a sus hermanitos. La escena con la que se encontró fue alarmante: uno de ellos presentaba varios moretones en todo el cuerpo. Se trataba del nene, quien le contó a su hermana mayor que Sosa lo había gol­peado. Entonces la joven les pidió explicaciones a su madre y a su padrastro. Pero la reacción de este fue brutal, ya que la golpeó en la panza, provocando que tuvieran que internarla de urgencia. 

Meses más tarde, una vecina le avisó a la joven que habían encontrado muerto al hermano menor. Cuando la hermana mayor le preguntó a la hermana de 9 años qué había pasado, la nena le contó que su madre tenía al niño apretado con una almohada mientras su padrastro lo violaba y que después el sujeto lo golpeó de manera reiterada. Sin embargo, recién al día siguiente su progenitora decidió llevar al niño al hospital. Los médicos no lograron reanimar al chico y, tras un examen general, notaron que tenía rastros de golpes violentos y signos de abuso sexual.

Indignación del juez

El juez mostró su indignación al notar que, durante la etapa de instrucción, el magistrado de Garantías había sobreseído tanto al imputado como a la madre del menor por la muerte del niño de 4 años, por lo cual no pudo solicitar que se los investigue nuevamente por homicidio ni aumentarle la pena a perpetua. 

Caputo también cuestionó a la perito Gabriela Maestri por hacerle preguntas inentendibles a la hermanita de 9 años, por lo cual se desperdició la cámara Gesell que, la mayoría de las veces, resulta una prueba fundamental.