Retiraron sin permiso a un niño de un jardín y lo metieron a una pileta

El nene fue operado de hipoacusia y no podía hundir la cabeza en el agua. Las autoridades estaban al tanto. El nene, de cuatro años, sufrió una otitis supurativa y trastorno de la conducta.

La Justicia platense investiga un gravísimo caso en el que un niño de cuatro años fue retirado sin autorización del jardín al que asiste para ir a un natatorio, donde se sumergió a una pileta pese a una contraindicación médica ya que había sido operado tiempo atrás.

Calificados voceros le contaron a Trama Urbana que todo tuvo lugar en el jardín Modelo Mariano Acosta de la localidad de Don Bosco, dentro del partido de Quilmes. De acuerdo a los familiares del nene de cuatro años, los docentes y las autoridades sabían que no podía ingresar al agua, ya que había sido intervenido quirúrgicamente hacía tres meses por una hipoacusia.

Todo salió a la luz cuando el damnificado le contó a su abuelo que se había metido a una pileta, por lo que el hombre encaró a los profesores y les remarcó el error. “Tenía prohibido meterse”, les recordó. No obstante, no recibió ningún tipo de respuesta. Los allegados relataron que al chico le detectaron hipoacusia al año y dos meses y eso hizo que sufriera un retraso del neurodesarrollo y someterse a diversas terapias, hasta la operación. Es por eso que posee el Certificado Unico de Discapacidad.

Una beca a cambio de la negligencia

Los padres lo matricularon este 2025 en el reconocido establecimiento educativo, que es privado, y afirmaron que estaban al tanto del cuadro, que llevaba al niño a no sumergir la cabeza debajo del agua, por recomendación médica.

Como si fuese poco, el progenitor, Diego, puntualizó que nunca firmaron una autorización para que lo retiraran del jardín, que fue pasada por alta. Así, en el marco de una actividad escolar lo sacaron de allí y lo llevaron hasta el natatorio del club Juventud de Bernal, pero no le dijeron que iban a ingresarlo al natatorio, sino que la directora y la maestra lo engañaron especificando que iba a permanecer en el lugar jugando en la sala. Esa misma noche comenzó a tener fiebre y dolores constantes en el oído.

Pese a que en un principio las autoridades se negaron a recibir a los padres y después dijeron que fue el niño quien convenció a los adultos de participar del plan, una cámara muestra al chico junto a sus compañeros, en el agua, de la que salió con aparente incomodidad y se acercó a las profesoras. Estas le pusieron antiparras y lo mandaron nuevamente a la pileta, donde hasta le sacaron una foto.

Ahora les ofrecieron a los padres una beca para su hijo, pero no quieren saber nada y solicitaron la suspensión de los responsables. Por lo pronto radicaron la denuncia en la Jefatura Regional 4 de la Dirección Provincial de Educación de Gestión Privada de Quilmes y en la UFI 4, donde la madre ya declaró.

Hoy en día el nene se encuentra descolarizado por orden médica ya que sufrió una otitis supurativa por el episodio y empezó a mostrar trastorno de la conducta.

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