Secuestro, terror y robo de Villa Elisa a El Peligro

El inicio del año 2025 ha estado marcado por una ola de delitos en la región, con reportes diarios de robos y asaltos. Sin embargo, lo ocurrido a un vecino de Villa Elisa ha generado un clima de mayor temor entre los ciudadanos.

El incidente tuvo lugar cuando un hombre de 38 años, quien trabajaba como chofer de la aplicación DIDI, fue sorprendido a plena luz del día. Pasadas las 15:30, el conductor se detuvo en la intersección de Camino Centenario y calle 56 para atender una llamada telefónica.

Siempre bajo lo detallado por las fuentes consultadas, fue en ese momento que dos sujetos armados lo amenazaron y se subieron a su vehículo, un Citroën C3, comenzando entonces con su pesadilla, la cual no iba a ser para nada breve.

Bajo amenazas, los delincuentes obligaron al chofer a conducir en dirección a Gutiérrez. Al llegar a la rotonda de Alpargatas, lo hicieron tomar la Ruta 2 hasta llegar a la localidad de El Peligro, en Arturo Seguí. Una vez allí, lo bajaron en un descampado y se llevaron el vehículo.

A pesar del shock, el hombre logró salir del lugar por sus propios medios y se dirigió a la comisaría Séptima de Abasto, donde radicó la denuncia y relató lo sucedido. Hasta el momento, los responsables no han sido identificados y son buscados intensamente por la policía.

Debido a esto, el análisis de las cámaras de seguridad de las inmediaciones, tanto públicas como privadas, será de vital importancia para poder dar con los autores del hecho. En cuanto al damnificado, se informó que no sufrió heridas que pusieran en riesgo su salud.

Discutió con su amigo y lo prendió fuego

Por otro lado, otro terrible hecho de violencia y barbarie sucedió en la región, cuando dos sujetos que conviven en una casa de la zona de 18 y 529 discutieron brutalmente, hasta el punto de terminar uno al Hospital con serias quemaduras.

Efectivos se encontraban patrullando y vieron a un hombre con heridas visibles conducir un Chevrolet Corsa, por eso, lo obligaron a detener la marcha para determinar qué le sucedía. Éste les contó que había discutido con su amigo, con el cual convive, y a raíz de esto, el implicado lo roció con alcohol, lo prendió fuego y luego, le robó el celular.

De inmediato lo trasladaron al Hospital Rossi. Donde le curaron sus heridas en el rostro y en el pecho y aseguraron que no corre peligro su vida. En cuanto al implicado, sigue prófugo y deberá responder por “amenazas agravadas; robo agravado por el uso de arma y coacción agravada”.