Abuela centenaria

La vecina platense María Esther Panzera cumplió 100 años, y comenzó a festejarlos rodeada por sus afectos en el Hogar del Padre Pío, donde vive. Ayer sopló las velitas junto a algunos familiares y hasta el intendente fue a visitarla. Hoy, le espera un gran asado en el predio del Club Español, para reunirse con el resto de sus parientes. 

Nacida en la ciudad el 21 de octubre de 1916, vivió su infancia en donde hoy se erige Barrio Norte, en 37 entre 5 y 6, cuando la zona “era todo campo” y su padre “tenía ovejas”. Luego, tras casarse con un gestor administrativo, vivió por Plaza Moreno, para después retornar al barrio de su juventud. “De joven bailaba mucho, era muy sociable”, destacó. Al parecer, la última condición nunca cesó: el pasado verano viajó a San Bernardo junto con el consejo de la Tercera Edad, y un año atrás lo hizo a Mar del Plata, su ciudad balnearia favorita. 

Pasados sus veinte años, la hoy abuela centenaria trabajó como modista y tuvo tres hijas. “María Cristina, que ya falleció, Ana María y yo”, contó a diario Hoy su hija Liliana, quien destacó que María tiene ocho bisnietos y seis nietos. “Cuando nací yo, en el 55, tuvo que movilizarse de acá para allá para poder tenerme. Eran las épocas de la llamada Revolución Libertadora”, recordó la heredera.

Una vida en La Plata obliga a repasar infinitas postales: incontables tardes en el Jockey Club, pícnics en el Club Universitario, meriendas en La París, tardes en Plaza Olazábal y muchas jornadas de fútbol en familia. “La mitad de la familia es de Estudiantes, y la otra, de Gimnasia” destacó su hija, aclarando que por eso María Esther “se declaró neutral”.