Logran desarrollar una fórmula pediculicida eficaz con nanotecnología

La formulación, elaborada por especialistas del Conicet, causó en estudios in vitro una mortalidad de piojos 35% mayor con respecto a un producto comercial.

Los especialistas del Conicet han desarrollado una fórmula pediculicida basada en compuestos vegetales, utilizando nanotecnología, que demostró ser altamente eficaz en la erradicación de los molestos piojos. Esta formulación innovadora ha arrojado resultados sorprendentes en estudios in vitro, superando significativamente la eficacia de los productos comerciales actualmente disponibles en el mercado.

El equipo de investigadores, encabezado por Ariel Toloza del Centro de Investigaciones de Plagas e Insecticidas de Villa Martelli (Cipein, Conicet-Unidef-Citedef), se propuso crear un medicamento más efectivo y respetuoso con el medio ambiente en un momento en el que los pediculicidas comerciales están mostrando una disminución en su eficacia.

La formulación desarrollada, cuyo resultado se ha publicado en la revista Pesticide Biochemistry and Physiology, se basa en una combinación de eugenol y timol, dos compuestos vegetales obtenidos del orégano, tomillo y clavo de olor. Estos ingredientes, vehiculizados por una nanomicela compuesta de polímeros, han demostrado una mortalidad superior al 85% en los piojos en estudios in vitro, en comparación con el 50% logrado por un pediculicida comercial de permetrina al 1%.

Según Toloza, la innovación radica en la capacidad de la nanoformulación para dispersar compuestos vegetales en emulsiones acuosas, evitando así el alto contenido de alcohol presente en los productos actuales, lo que la hace más segura desde el punto de vista toxicológico y más respetuoso con el ambiente medio.

Alejandro Lucía, del Instituto de Ecología y Desarrollo Sustentable (Inedes, Conicet-UNLu), destaca la complejidad del proceso de desarrollo, que requiere adaptar las formulaciones a las características biológicas y comportamentales de cada especie de insecto plaga. En este sentido, el trabajo en colaboración con el Dr. Eduardo Guzmán de la Universidad Complutense de Madrid ha sido fundamental para comprender los fenómenos fisicoquímicos implicados en estos sistemas.

El estudio también está abordando la seguridad de estas nanoformulaciones en la piel, en colaboración con el doctor Álvaro Jimenez-Kairuz y su equipo en la Universidad Nacional de Córdoba, con el objetivo de garantizar su inocuidad para su uso humano.

Eunice Sosa-Quiroga, cuya investigación forma parte de este proyecto, destaca la importancia de este avance, obtenido en parte gracias a una beca de movilidad federal otorgada por la Agencia Nacional de Promoción Científica y Tecnológica (ANPCyT), que le permitió realizar una estadía en la Universidad Nacional de Córdoba.

Este hito científico no habría sido posible sin la colaboración de Agustina Fañani y Emilia Martínez del Inedes, así como de Ana Puente-Santamaria y Eduardo Guzmán del Instituto Pluridisciplinar de la Universidad Complutense de Madrid, subrayando la importancia de la colaboración internacional en la investigación de vanguardia.

Noticias Relacionadas