YouTube “se cayó” por primera vez y generó shock mundial

En Argentina, el formato de televisión digital es el favorito de los usuarios y las proyecciones indican que se profundizará su consumo. ¿Cómo afectaría un “apagón” más prolongado?

"Algo anda mal, pero un equipo de monos muy entrenados fue enviado para arreglar la situación". Ese fue el mensaje que acompañó el encabezado que rezaba "Internal Error 500", para dar cuenta de una situación inédita a escala global: por primera vez en su historia, YouTube esta caído. El humor en el mensaje procuró apaciguar lo que para millones de usuarios era poco menos que una tragedia.

La anomalía duró apenas 45 minutos, pero la trascendencia a escala global que tuvo el incidente expresa la enorme influencia de esta plataforma: la noticia fue publicada por los principales medios de nuestro país y del mundo, y las repercusiones en el resto de las redes sociales generaron un tráfico de datos impresionante.

YouTube es responsable del 18% del tráfico en la web. A diferencia de lo que suele ocurrir con Twitter, Facebook u otras redes sociales, esta red social no había padecido este tipo de dificultades. Alrededor del planeta, millones de personas invierten varias horas diarias en esta página. Se informan, se forman y se entretienen a través de la plataforma.

Cambio de paradigma en Argentina

Transcurridos 16 años del siglo XXI, ya existe una generación de nativos digitales. Se trata de una camada de chicos que nacieron con la explosión de internet y las tecnologías de información y comunicación. En ese marco, YouTube es uno de los principales responsables de un cambio de paradigma sustancial que afecta, principalmente, a la televisión y al negocio en torno a ella.  

Ante las programaciones estáticas en horarios preestablecidos que ofrecen las empresas televisivas, esta red social tiene una característica que viene a romper con el estatismo: la versatilidad. Los usuarios pueden ser consumidores y productores de contenidos al mismo tiempo y, además, pueden ellos mismos armar sus grillas de contenidos. Miran cuándo y dónde quieren: en la comodidad del hogar, en los tiempos de descanso en el trabajo, en el micro. Además, pueden hacerlo desde distintos dispositivos: teléfonos inteligentes, tabletas, notebooks, PC´s.   

Estas afirmaciones tienen una corroboración empírica: según un informe de la Cámara Argentina de Internet (Cabase), el video y la televisión en línea son “el formato favorito” de los usuarios argentinos y en el último año registró un aumento un 47%. Un dato más: el tráfico de contenidos audiovisuales representa el 59% del tráfico total del país.

Para 2020, el estudio prevé que el consumo de video potenciado por plataformas como YouTube representará el 79% del tráfico total de internet en Argentina. ¿Cómo sería la reacción –de la empresa y de los usuarios- ante un “apagón” prolongado?