La UNLP investiga la utilización de residuos de pilas para crear nuevos materiales

Los expertos desarrollaron métodos para obtener nuevos compuestos que podrían usarse en pinturas para entornos donde la higiene es importante, como hospitales, cocinas y sanitarios.

Un grupo de científicos del Centro de Investigación y Desarrollo en Tecnología de Pinturas (Cidepint), el Centro de Investigación y Desarrollo en Ciencias Aplicadas, dependiente de la Facultad de Ciencias Exactas de la UNLP y el Laboratorio de Plantas Piloto de la UNLP trabajan en la recuperación de materiales de pilas en desuso que exhiban propiedades antimicrobianas.

Los expertos desarrollaron métodos para obtener nuevos compuestos. Según precisó la casa de altos estudios, disuelven el zinc y manganeso de las pilas agotadas con ácido sulfúrico que obtienen mediante la oxidación de azufre con la ayuda de bacterias.

Además de lograr un producto innovador, de interés para la salud y con alto valor agregado, buscan contribuir al cierre del ciclo de vida de las pilas en desuso.

“El zinc y el manganeso, dos metales presentes en las pilas, pueden representar un riesgo para el ambiente y la salud humana cuando se encuentran en altas concentraciones. En este contexto, la posibilidad tecnológica de recuperarlos a partir de las pilas podría ofrecer una solución efectiva a los problemas ambientales asociados”, expresó la Dra. María Victoria Gallegos, química e investigadora del Cindeca.

Y amplió: “El proceso de reciclado de pilas se lleva adelante mediante un proceso biohidrometalúrgico. Las pilas agotadas se abren y separan en plástico, chatarra y metales de electrodos. Los metales zinc y manganeso en forma de óxidos e hidróxidos se disuelven con ácido sulfúrico. La innovación clave en este proceso radica en que se usa ácido sulfúrico usado, el cual se obtiene mediante la oxidación de azufre elemental con la ayuda de bacterias”.

En cuanto al desarrollo de los materiales de zinc como aditivos antimicrobianos para pinturas, el trabajo surgió en el marco de un trabajo final de Licenciatura en Química y Tecnología Ambiental de Guillermo López.

“Las pinturas antimicrobianas producidas en la Argentina contienen generalmente biocidas orgánicos, como los derivados de isotiazolinonas y carbamatos, que tienen la desventaja de disminuir su eficiencia antimicrobiana con el tiempo. Por otro lado, los biocidas orgánicos están siendo cuestionados por su toxicidad y el impacto ambiental que generan”, completó la doctora Natalia Belloti, biotecnóloga e investigadora del Cidepint.

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