Los falsos atractivos que resultan perjudiciales para el país

De la mano de las Lebac, la bicicleta financiera obtuvo millonarias ganancias

Las Letras del Banco Central le reportaron el año pasado un rédito del 38% a los inversores en el mercado local. El peligro que representa para el país el incremento de la deuda a corto plazo. Los falsos “atractivos” promovidos por las autoridades económicas. La opinión de los especialistas

En medio de un panorama económico en el que la recesión y la inflación no ceden, la situación social parece acorralar al gobierno de Mauricio Macri. Sin embargo, hay un sector que ha sabido conseguir cuantiosas ganancias a lo largo de todo 2016 y el primer bimestre de este año, y ese es el especulativo, el cual ha destinado su dinero a la compra de las Letras del Banco Central (Lebac).

Las penurias económicas que sufre gran parte de la sociedad parecen no hacer mella en quienes invierten en estos títulos de deuda a corto plazo que licita la entidad que conduce Federico Sturzenegger. Por el contrario, este sector se ha provisto de millonarios dividendos en la denominada bicicleta financiera del mercado local.

De acuerdo a los datos oficiales, hoy existen 700.000 millones de pesos en Lebac en circulación en todo el territorio nacional, y solo durante 2016 el Banco Central destinó poco más de 170.000 millones de pesos en intereses para pagos por deuda con estas Letras, mostrándose así las ganancias extraordinarias que tuvieron los grandes especuladores.

Los grandes inversores que traen capitales “golondrinas” obtuvieron el año pasado un 38% de ganancia, pero no dejaron ese dinero en la Argentina, sino que se lo llevaron a sus casas matrices en el extranjero. Esto aumentó la fuga de capitales al exterior, que en los últimos 12 meses tuvo un ritmo de fuga de casi 1.300 millones de dólares.

A dicha situación se le sumó que el stock de Lebac creció en una temporada más de un 156%, con un lucro para aquellos que invirtieron en dólares de un 22% anual, un registro que no se da en ninguna otra parte del mundo, y que convierte a la Argentina en un lugar perfecto para los especuladores mundiales.

Especulación

En la licitación mensual de Lebac del pasado martes, la entidad que comanda Sturzenegger decidió dejar la tasa a 35 días en el 22,25% anual, un nivel que generó cierta confusión en el mercado, dado que no hubo uniformidad con la base de comparación. Además esto vuelve a darle a los usureros y acaparadores de ganancias fáciles y rápidas un negocio fenomenal.

Especialistas consultados por diario Hoy remarcaron el grave peligro que representa para la economía nacional el incremento de la deuda a corto plazo a través de las Lebac. Según los expertos, el especulador en este momento no se está llevando todo el dinero del país, sino que lo está acumulando a su favor y en contra del BCRA. Sin embargo, cuando el inversor decida retirar todo ese capital de la plaza local, el mercado se encontrará con el gran problema de no tener la capacidad de abonar esa suma que se adeuda.

La decisión de las autoridades económicas de emitir Letras a diestra y siniestra con altas tasas de interés, generando falsos “atractivos” para los inversores que resultan perjudiciales para los intereses del país, se hace con un solo objetivo, que es el de reducir la inflación. Subir aceleradamente la tasa de interés como herramienta de política para bajar la inflación solo hizo que los stocks de Lebac en circulación se aceleraran, incrementándose una deuda de niveles imposibles de pagar para el país. 

A pesar de ello, el Banco Central no pudo contener la estampida inflacionaria, que se ubicó en 2016 por encima del 40 por ciento, a lo que se le sumó un déficit fiscal cercano al 7%, lo que llevó a que, para contener esta situación, la entidad estatal emitiera Lebac para reabsorber los pesos circulantes en el sistema. Lo único que se consiguió ante este escenario fue generar en el mercado financiero una voracidad pocas veces vista por parte de los grandes bancos y fondos de inversión por hacerse de estas Letras emitidas por el BCRA, lo que llevó a que las entidades bancarias ganaran 74.560 millones de pesos el año pasado, con un incremento del 36% del rédito en dólares para los bancos extranjeros.

Las ganancias extraordinarias conseguidas por los especuladores con las Lebac dejan al descubierto el lado más crudo de la política económica encarada por el gobierno de Mauricio Macri, que no logra atraer capitales productivos y genuinos a nuestro país, dejando el paso solo a los usureros que buscan ganancias con el mínimo costo, originando una bicicleta financiera con consecuencias inimaginables para la Argentina.

Mercados, en alerta

Ante la decisión de Federico Sturzenegger de seguir emitiendo Lebac para tratar de contener el nivel inflacionario en el país, desde la city porteña se trata de verificar cómo puede beneficiar o perjudicar esta política a sus intereses.

De acuerdo a diversos informes que se pudieron conocer, los pronósticos son varios: algunos optimistas y otros pesimistas, algunos que confían en la política oficial y otros que creen que la misma no dará los resultados esperados por Dujovne.

Los pronósticos más positivos plantean que las Lebac emitidas por el Banco Central terminarán el año con una tasa de interés que rondará el 17%, yendo en concordancia con el índice de inflación que pronostica el Gobierno nacional. Los pronósticos más negativos observan que estas tasas estarán por encima del 23%, más cerca de la inflación que plantean la mayoría de las consultoras privadas.

Mientras hoy en día el porcentaje de Lebac en relación al PBI están llegando a alrededor del 10%, el mercado local prevé que el año 2017 concluirá con una deuda que transitará entre el 13,6% y el 14,7% de la deuda, marcando un creciente nivel de endeudamiento, algo preocupante para el futuro cercano.

Además, desde la city se vaticina un dólar a fin de año superior a los 18 pesos, lo que llevaría a que el déficit fiscal no baje y se mantenga en torno al 7% anual. De esta manera, se replicaría un panorama similar al sucedido el año pasado, causando alerta en un mercado cargado de impredictibilidad y desá­nimo para las arcas nacionales.

Cifras de una verdad incontrastable

- $700.000 millones las Letras del BCRA en circulación en la Argentina.

- $170.000 millones de intereses pagos por el Banco Central por deuda con Lebac el pasado año.

- $74.560 ganaron las entidades bancarias la temporada anterior.

- 38% ganaron sin invertir un peso quienes compraron Lebac el año pasado.

- 36% fueron las ganancias en dólares de los bancos en los últimos 12 meses.

- 23% rinden ahora las Letras emitidas por el Banco Central.

- 10% de retornos superiores tuvieron las Letras a los tradicionales plazos fijos.

- 22% la ganancia que tuvieron en dólares los compradores de Lebac en 2016.

“Con este nivel de especulación financiera es imposible crecer”

Roberto Dvoskin

Exsecretario de Comercio Interior

“Lo que se está viviendo en la Argentina es una especulación financiera sin precedentes con las Lebac, porque si un señor me ofrece a mí un 30% contra nada, con una inflación del 25%, yo pongo todo al 30% y no invierto un peso, ya que entonces lo que hago es cuidar mi capital y mejorarlo.

Nadie va a venir a invertir al país si se tiene la posibilidad concreta de conseguir mucho más dinero sin arriesgar absolutamente nada. Cuando alguien invierte en una fábrica o en la fundación de una empresa tiene un problema grande, porque después tiene que vender lo que produce en la misma. Con el tema de las Lebac no hay que vender nada, sino que lo que hay que hacer es simplemente especular y así se consigue la plata que se necesita. Es muy sencillo este juego.

Con todo este nivel de especulación financiera es imposible crecer. No hay ninguna posibilidad de lograrlo en el marco de este programa que lleva adelante el Ejecutivo. No te da oportunidades. Además, el problema central es terminar invirtiendo la plata en un lugar mucho más sencillo, como es el mercado financiero”.

“Las Lebac van construyendo una inmensa bola de endeudamiento”

José Castillo

Economista. Profesor en la UBA

“Los capitales del exterior entran a la Argentina en dólares; eso es deuda externa. Se pasan a pesos con la compra de Lebac y obtienen una superganancia del 22% anual, que es en pesos, pero como el dólar está planchado, vuelven a pasarse a dólares. Es una fuga de capitales.

Ese 22% es una ganancia en dólares, una tasa que no existe en ningún lugar del mundo, ya que para darse una idea el bono de referencia de los Estados Unidos, el equivalente a una Lebac en el país del norte, te rinde un 1% o menos anualmente. Estamos hablando de un valor terrorífico. 

Las Lebac van construyendo una inmensa bola de endeudamiento. Estamos hablando de 600.000 millones de pesos, que es el equivalente a toda la base monetaria. O sea que todo el dinero que hay en circulación está en el Banco Central: es una sumatoria a la deuda argentina.

Toda esta bicicleta financiera genera un endeudamiento terrible, porque las Lebac son bonos de deuda. Las Letras son bonos del Tesoro de deuda, lo que deja para el futuro inmediato un aumento impresionante del endeudamiento. El especulador en este momento no se está llevando la plata, lo que está haciendo es acumularla a su favor en contra del BCRA”.

“Esta política duplicó la fuga de divisas al exterior”

Fernanda Vallejos

Economista. Profesora en la UBA

“El gobierno de Mauricio Macri buscó contener la inflación con la emisión casi descontrolada de Lebac. Esto llevó a que desde el Banco Central se instrumentara una política de elevadas tasas de interés, que le produjo a quienes invirtieron en las mismas una ganancia del 38% en 2016, algo que no se ve en ningún lugar del mundo.

El stock de Lebac se multiplicó el año pasado unas 2,5 veces, mientras que el monto de intereses se duplicó, ascendiendo a 14.700 millones de pesos mensuales. Esta política duplicó la fuga de divisas al exterior, liberalizando el mercado cambiario y dejando que las inversiones rapaces se hicieran presentes en el país, originándole un panorama por demás cargado de incertidumbre al corto y mediano plazo.

Al haber crecido más de un 156% la provisión de Letras, alcanzando las Lebac a poco más de 700.000 millones de pesos circulantes en la Argentina, solo se le dio visibilidad al reclamo de los mercados financieros que pedían en forma insaciable más dólares en curso, aunque la mayoría de ellos no quedan en el país y se fugan al exterior. Con este accionar se ha beneficiado a algunos especuladores y se ha perjudicado a la inmensa mayoría de los argentinos”.

“Se repite la historia del programa económico de Martínez de Hoz”

Julio Gambina

Economista y doctor en Ciencias Sociales

“El nivel de endeudamiento que está asumiendo el Banco Central es alarmante. Así como la Argentina tomó más de 50.000 millones de deuda pública el año pasado, el Banco Central tiene un nivel de endeudamiento en Lebac que supera la circulación monetaria, un déficit oneroso que tiene un costo para el pueblo argentino.

Se repite la historia del programa económico de Martínez de Hoz. Hay que recordar que en 1977 se estableció una nueva ley de entidades financieras que todavía nos rige, la cual facilitó y favoreció que se llevara adelante una política económica cuyo elemento central fue la desindustrialización de la economía nacional. Aquel fue un proceso muy parecido al actual, por el cual la Argentina está privilegiando la ganancia de las entidades financieras con un gran endeudamiento externo.

Con las Lebac, lo que se está favoreciendo es lo que piden los grandes productores, es decir el retraso cambiario. Están pidiendo a gritos una devaluación para terminar con este problema. Esta política monetaria que empuja el BCRA no solo genera recesión e inflación con un elevado costo social, sino que abre las puertas para que a muy corto plazo haya una nueva devaluación”.