Policías: la necesidad le gana a la vocación

La fuerza de seguridad se ha convertido en una bolsa de trabajo. La inseguridad reclama más agentes y la crisis económica provoca que miles sean los aspirantes. Los efectivos se reciben en seis meses, sin la debida preparación. Los riesgos a los que se expone a la sociedad

La inseguridad y una economía en crisis, dramas que no ha podido solucionar el modelo kirchnerista, al conjugarse,  generaron otra problemática social: la de que jóvenes sin vocación se inscriban en las escuelas de policías con el solo objetivo de obtener un salario e ingresar al sistema formal del trabajo y salir de la miseria, pero con poca actitud para cuidar a sus conciudadanos.

Además, el incesante reclamo de la sociedad civil para vivir en paz y tranquilidad, provocó que los gobernantes opten por inundar de agentes de seguridad formados en tiempos récord. Así fue que 10.000 cadetes cumplimentaron una carrera exprés de seis meses en escuelas descentralizadas,  al parecer, sin estar listos para portar armas y con poca o casi nula comprensión de la importancia institucional de cuidar a los ciudadanos.

En otras palabras, las fuerzas de seguridad de nuestro país y de las provincias se presentan como una bolsa de trabajo y los ingresantes egresan a los pocos meses sin la preparación suficiente. Es común apreciar en La Plata y en la región a jóvenes uniformados prendidos a su celular, sin el chaleco antibalas colocados y con actitud de no importarle la custodia de los comercios y vecinos de las zonas a las que son asignados.

Esta situación conlleva dos riesgos terribles: la indefensión de los ciudadanos y el peligro para el propio policía. En estos tiempos donde las drogas y las adicciones son casi moneda corriente, los poco precavidos agentes se convierten en un blanco fácil para los delincuentes.

En las páginas policiales de este diario se han informado reiterados casos de robos de armas a uniformados cuando éstos cumplían funciones de vigilancias en centros comerciales. Es que los flamantes efectivos no han tomado conciencia del peligro que significa estar desatentos en esta selva urbana.

¿Un semestre de formación alcanza?

Para el especialista en seguridad Luis Vicat no es posible formar a un policía en seis meses. “Se necesitan excelentes instructores, un plan de estudios pertinente y clases teórico-prácticas, y eso requiere tiempo. En países como Estados Unidos la capacitación intensiva es de al menos un año y luego continúa con frecuentes academias”, señaló Vicat en diálogo con Hoy.

“En seis meses les enseñan derechos humanos, historia, aspectos legales y procesales y varias materias de contexto. Y poco es el desarrollo en la preparación táctica”, agregó Vicat.

Los egresados de las escuelas de policías, en muchos casos y algunas experiencias así lo demuestran, no están capacitados para portar armas, no entienden la esencia de su función y pueden convertirse más en un problema que en una solución.

“El mes pasado una oficial de policía recientemente recibida se tiroteó con cinco delincuentes en Luján, cuando se movilizaban en una camioneta robada. Ella sufrió un roce de bala en la cabeza, es decir, salvó su vida de milagro. Los malvivientes volcaron y fueron detenidos. Desde el oficialismo se presentó a la uniformada como una heroína. Sin embargo el procedimiento tuvo varios errores. Ella abrió fuego sin saber si los ladrones tenían de rehén a una víctima”, indicó Luis Vicat.

En conclusión, los miles de jóvenes que se han recibido de oficiales policiales al finalizar el 2014  lograron ingresar a un mundo laboral estable y con cobertura social, pero la preparación que tuvieron está lejos de lo ideal. Se requiere un plan a largo plazo elaborado con seriedad y responsabilidad, el pueblo bonaerense es el que está en riesgo.

“Se meten por un sueldo, compromiso laboral cero”

Un oficial con 20 años en las calles platenses explicó que en la mayoría de los patrulleros del Comando de Prevención Comunitaria ahora van tres policías. “El tercero es uno de los 10 mil que egresaron en diciembre. Nosotros tenemos que capacitarlos porque casi no saben nada”, sostuvo.

“Se meten por un sueldo. Compromiso laboral cero”, sintetizó el subcomisario, al referirse a los nuevos policías formados en seis meses. “También es un problema que muchos de ellos están con sobrepeso”, agregó la fuente.

Pero lo que más preocupa es que no saben usar el arma. Un ejemplo que explica esta situación es lo que pasó en Villa Gesell el 26 de diciembre cuando un reciente egresado mató de un tiro, al parecer accidental, a un compañero.

“Reciben 96 horas reloj en práctica de tiro”

El subsecretario de Planificación del Ministerio de Seguridad, Fernando Jantus, habló con Hoy y explicó que “los policías bonaerenses reciben la misma o más cantidad de horas cátedras que en academias de algunos condados de Estados Unidos”.

Respecto a la formación en el uso de armas, Jantus indicó que durante los seis meses de la carrera los cadetes recibieron 96 horas reloj en práctica de tiros.

El funcionario de la cartera que conduce Alejandro Granados destacó también que “los 10.000 nuevos policías recibirán capacitaciones anuales en los centros de reentrenamiento con cursos específicos que deberán aprobar”.