Stiuso pidió apartar a Casanello de la causa por “abuso de autoridad” contra Cristina Kirchner

También solicitó que se separe al fiscal Franco Picardi, militante de La Cámpora. El exespía los cuestionó y exigió que ellos no sean quienes investiguen la denuncia por la escucha

El exjefe de Operaciones de la SIDE, Antonio Stiuso, solicitó en el día de ayer apartar al juez federal Sebastián Casanello y al fiscal Franco Picardi de la causa por supuesto “abuso de autoridad” contra la expresidenta Cristina Kirchner. Además, el exespía echado de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI), ex-SIDE, pidió ser querellante en el caso y que el expediente no se mueva hasta que se resuelva la recusación contra el juez y el fiscal.

La acusación contra la exmandataria surgió a partir de la difusión de una escucha en la que ella aludió al “armado” de causas en contra de Stiuso. En un escrito de 20 carillas que fue presentado ante Casanello por su defensa, el exespía pidió ser querellante en el caso para tener acceso al expediente, solicitar medidas de prueba y participar eventualmente en un juicio oral.

Entre los argumentos de Stiuso para que el magistrado sea apartado de la investigación, está el hecho de que Casanello ya fue separado de otro expediente en el que el exagente estaba imputado por enriquecimiento ilícito durante sus años en la AFI. Dicha recusación prosperó ante un pedido del propio imputado. 

De este modo, el exespía puso en duda la imparcialidad del juez, quién es apodado como “tortuga” por su lento accionar para que las causas a su cargo avancen, varias de las cuales tienen como denunciados a exfuncionarios del anterior gobierno. Cabe recordar que la legisladora Graciela Ocaña había pedido en junio del año pasado que se investigara la actuación de Casanello en la ruta del dinero K, por “parcialidad y excesiva demora”, y las presuntas reuniones con la expresidenta en la residencia de Olivos. 

El fiscal kirchnerista

Las razones que expuso Stiuso para apartar a Franco Picardi se relacionan con su inclinación ideológica y su pasado laboral. El exagente señaló que el fiscal fue funcionario del Ministerio de Justicia de la Nación en el mismo momento en que se redactó el memorándum de entendimiento con Irán por el atentado a la AMIA, cuando Cristina Kirchner aún era presidenta. 

Por otro lado, el exespía indicó en el escrito que Picardi fue compañero de gabinete en el Ministerio de Juan Martín Mena, quien era el segundo de la AFI en el momento en que Stiuso fue despedido. Al fiscal lo recusó también porque aportó en la campaña del Frente para la Victoria en las elecciones legislativas del año 2013, colaborando con una suma de 20.000 pesos. 

En tal sentido, vale recordar que Picardi es camporista y fue designado como fiscal federal en Comodoro Py en mayo de 2015. Estos antecedentes generaron polémica cuando se conoció que el fiscal resultó sorteado para investigar a la expresidenta por “abuso de autoridad” y que, con las pruebas existentes, debe determinar si hay que imputarla. 

“Soy víctima de una persecución”

Así dijo sentirse el exespía en el escrito que presentó solicitando la recusación de Casanello y Picardi, en la causa que investiga la escucha de la conversación entre la expresidenta y el extitular de la AFI, Oscar Parrilli. En el diálogo difundido a través de los medios, Cristina Kirchner pronunció la frase “hay que matarlo”, ante lo que Stiuso expresó que “más allá de la frase poco feliz” es necesario “contextualizar”.

“Empezá a buscar todas las causas que le armamos… no que le armamos, que le denunciamos a Stiuso”, ordenó la exmandataria a Parrilli. En tal sentido, el exagente recordó haber sido víctima de “amenazas de muerte” dirigidas hacia él y su familia por parte de “interposita persona allegada a quien entonces ocupaba el Ejecutivo”.

El anterior gobierno denunció penalmente a Stiuso por contrabando agravado y evasión fiscal de materiales que fueron enviados a la Secretaría de Inteligencia pero no eran necesarios para su trabajo. Fue acusado también por la presunta intervención ilegal de teléfonos y por ocultar información sobre la investigación del atentado a la AMIA.