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“Desde el primer día de pretemporada Chirola nos dijo que había que ganar el clásico”
Uno de los héroes del clásico habló en exclusiva para diario Hoy y contó cómo vive la alegría de haber marcado un gol que quedó en la historia de Gimnasia. Alan Lescano, la promesa del Lobo que cumplió el sueño del pibe.
Gimnasia hizo historia, quebró el maleficio y tras 13 años se quedó con el clásico de la mano de Chirola Romero y sus pibes. Los juveniles albiazules fueron claves, jugaron el derbi como una final. Y la figura de la cancha, Alan Lescano, habló en exclusiva con diario Hoy para contar sus sensaciones en el día después.
—¿Cómo se vive el día después de haber ganado el clásico?
—La verdad que estoy pasando horas muy lindas. Todo en general es conmovedor, desde las cosas que uno ve, ya sea en los diarios como en las redes sociales. Como también los mensajes de felicitaciones que van llegando. En lo personal a uno le hace bien el afecto, hoy (por ayer) no paré de mirar el partido.
—¿Cuánto soñaste una tarde como la de ayer? ¿Qué significa para un “Pibe Lobo” como vos ganarle a Estudiantes y encima con un gol?
—Toda la vida soñé con este momento. Cuando sos chico y se empieza a competir o cuando vas creciendo en las inferiores, uno sueña o imagina lo que es jugar un clásico, ganarlo y encima hacer un gol. Estoy muy contento, muy feliz, por suerte se me dio. Nosotros necesitábamos darle esta alegría a la gente y Gimnasia necesitaba sacarse este peso de encima.
—Tanto vos como varios de tus compañeros, los llamados “pibes”, son expertos en clásicos, primero en Reserva y ahora en Primera. ¿Cuánto influyó Chirola en el triunfo de ayer, y cómo les aconsejó vivirlo?
—Por suerte nuestra camada, la de la Reserva de Chirola, tuvo la suerte de nunca perder un clásico. Por eso nos enfocamos en el inicio de la pretemporada en hacer un buen torneo y lo primero que nos dijo Chiro (Romero) es que había que ganar el clásico como fuera posible. Obviamente todos coincidimos, había que darle una alegría a nuestra gente que tanto lo merecía. Es hermoso haberlo podido ganar y hoy disfrutarlo.
—Contanos de dónde venís. ¿Cómo vivió tu familia el gol en el clásico?
—Llegué a Gimnasia proveniente de Bolívar, la verdad que toda mi vida soñé con un partido como este. Toda mi familia estaba contenta y por suerte ayer pudieron acompañarme y venir a alentarme a la cancha. Cuando terminó el partido pudimos abrazarnos, pude charlar con ellos. Disfrutar con mi familia una alegría como esta es lo más lindo que me puede pasar, es algo único.
—¿Cuál es el secreto de esta camada de juveniles que le sientan tan bien los clásicos?
—Este es un grupo de personas muy positivas, buenos jugadores pero mejor gente aún. Siempre en Gimnasia, ya seamos los pibes como los jugadores de mayor experiencia, al que no le toca jugar siempre apoya. Ese es nuestro secreto.
—Ayer en un programa de televisión tu novia, tripera de toda la vida, habló muy emocionada acerca de tu gol. ¿Qué significaron para vos esas palabras?
—Cuando llegué al club conocí a mi novia. Siempre me ayudó, siempre me acompañó incluso cuando las cosas no salían. Estoy agradecido con ella, la amo demasiado. Darle una alegría a ella, como a todos los hinchas, es un orgullo enorme.