El apellido Barros Schelotto, la dinastía que continúa en Gimnasia y el sueño del pibe
Bautista, sobrino de Guillermo y Gustavo, desea ser titular en Reserva, jugar en Primera y ser dirigido por el astro, Diego Armando Maradona
El linaje de la familia sigue en pie. Bautista Barros Schelotto es hijo de Pablo, hermano mayor de los exentrenadores de Boca Juniors, juega en la reserva de Mariano Messera y Leandro Martini. En diálogo con Fortunato Sports expresó sus ganas de compartir entrenamientos con Diego.
“Tener a Maradona de DT sería algo único, impensable en su momento. Jamás se me hubiera ocurrido que Maradona pudiera estar en Gimnasia”, manifestó el juvenil. Además, dijo que le genera “expectativas, ganas de estar en Primera y estar ahí con él, compartir momentos, por lo que fue y por lo que sigue siendo”.
Bautista es lateral derecho, debutó en la reserva en el año 2017 y aguarda su oportunidad para ser promovido de la divisional a la mayor.
En la actualidad el puesto que ansía ocupar el juvenil le corresponde a Maximiliano Caire y detrás se encuentra Leonardo Morales, dos futbolistas que no son surgidos de las inferiores del Lobo y que se les termina el contrato el 30 de junio del corriente año.
Respecto a la posibilidad de poder subir a la mayor, el lateral afirmó: “Arranqué el año con el objetivo de ganarme un lugar en reserva, hacerme fuerte y jugar de titular varios partidos y así tener la posibilidad de que me vean para primera”. Aunque el sueño es grande, no es una utopía imaginar que en el corto plazo pueda ser dirigido por Maradona en un entrenamiento.
La posición de lateral es una de las más complejas a la hora de conseguir a un futbolista. Hoy en día ya no surgen de las inferiores laterales; la mayoría quiere ser delantero, volante central, zaguero.
El último que se afianzó como marcador de punta en el Lobo fue Facundo Oreja, siete años ininterrumpidos en Gimnasia, más de ciento ochenta partidos y referente de varios planteles. Tras su salida en 2019 no hubo un jugador que pudiera adueñarse definitivamente del puesto; ningún indiscutido. Es más, muchas veces discutidos.
“Mi apellido nunca me generó una presión. Es un orgullo, una alegría. Sé lo que mis tíos representan en Gimnasia y están muy pendientes de mí”, sostuvo Barros Schelotto en relación con el legado familiar que dejaron los mellizos.
Por último, enfatizó: “Mi sueño es jugar en primera, es lo que me permito por ahora soñar, porque todavía no lo logré; obviamente hay otros objetivos, pero antes debo lograr este sueño que vengo deseando desde hace 14 años y todavía no pude lograrlo”.