A espaldas de la FIFA y de la UEFA, los clubes más poderosos de Inglaterra, Italia y España anunciaron la creación de un nuevo certamen. El Clásico te cuenta en detalle el escándalo que sacude al Viejo Continente.
Las cuentas oficiales de los clubes más importantes de Europa soltaron la bomba bien entrada la noche del domingo. Todos replicaron un mensaje contundente y rupturista: anunciaron la creación de la Superliga Europea, un torneo que, palabras más, palabras menos, llega para reemplazar a la UEFA Champions League.
Los 12 equipos considerados fundadores son Milan, Inter y Juventus por Italia; Arsenal, Chelsea, Liverpool, Manchester City, Tottenham y Manchester United por Inglaterra; Real Madrid, Barcelona y Atlético de Madrid por España.
A la flamante competición la jugarán 20 clubes por año. Serán los 12 mencionados más otros tres que serán invitados a la brevedad para sumarse como fundadores. Los cinco equipos restantes se clasificarán dependiendo de su rendimiento en la temporada anterior.
Se dividirán en dos zonas de 10: jugarán todos contra todos en formato ida y vuelta (en total serán 18 fechas). Luego clasificarán los primeros cuatro de cada grupo para jugar los cuartos de final, semifinal y final.
Los cambios con respecto a cómo se juega la Champions son notables. En primer término, se reduce considerablemente la cantidad de equipos, más dinero para repartir entre menos clubes, y aumenta la cantidad de encuentros: en la UCL los “grandes de Europa” tienen solo cinco partidos asegurados mientras que en la Superliga parten de una base de 18, por ende, a más televisación y más publicidad, más dinero.
La respuesta de la FIFA y la UEFA
La casa madre del fútbol advirtió en enero, mediante un comunicado firmado por su presidente Gianni Infantino, que impondrá duras sanciones para los futbolistas o instituciones que formen parte del nuevo torneo. Los jugadores serán excluidos de la Copa del Mundo y además no podrán formar parte de ningún torneo que sea organizado por FIFA y las seis confederaciones: AFC, CAF, Concacaf, Conmebol, OFC y UEFA. Es decir, quedarán apartados de la Copa América, Eurocopa, Champions, Europa League e incluso la Libertadores y Sudamericana.
Por su parte, la Unión de Federaciones Europeas de Fútbol aseguró que todas sus asociaciones miembro trabajarán en conjunto para detener el proyecto que se fundamenta en el interés propio de unos pocos clubes. “Seguiremos unidos en nuestros esfuerzos para detener este cínico proyecto, un proyecto que se fundamenta en el interés propio de unos pocos clubes en un momento en el que la sociedad necesita más que nunca la solidaridad”, rezó el comunicado para responder a la Superliga.