El piloto brasileño vuelve a la carga por el título del británico y acusará a la FIA y a la FOM ante la Corte Superior de Justicia de Londres. Además, pide una indemnización de entre 64 y 150 millones de libras.
12/03/2024 - 00:28hs
En 2008 Felipe Massa podría haber sido Campeón del Mundo de la Fórmula 1, pero un choque en el Gran Premio de Singapur crearía una bola de nieve que ubicaría a Hamilton en primer lugar al final de la temporada y al brasileño en segunda posición solo por un punto. El expiloto de Ferrari y Williams presentó una demanda ante la Corte Superior de Justicia de Londres contra la Federación Internacional del Automóvil (FIA) y a la Formula One Management (FOM) para lo que él considera “corregir la injusticia histórica”.
El brasileño cuestiona el resultado del Mundial de 2008 y, principalmente, el Gran Premio de Singapur en el que los jefes del equipo Renault hicieron estrellarse al piloto brasileño Nelson Piquet Jr. para provocar la entrada en pista del coche de seguridad.
Massa, que venía primero, perdió su ventaja contra el piloto principal de Renault, Fernando Alonso. Una mala parada en boxes por parte de Ferrari hizo que el brasileño terminara quedando 13 y le dio la victoria al asturiano. Renault finalmente fue castigado por esa acción y su jefe de equipo, Flavio Briatore, fue suspendido y se le negó el ingreso a carreras fiscalizadas. La investigación de la carrera se llevó a cabo una vez finalizado el campeonato.
El documento presentado por Massa pide “una declaración que en caso que la FIA no hubiera incumplido sus regulaciones, esto hubiera cancelado o ajustado los resultados en el Gran Premio de Singapur con la consecuencia de que el Sr. Massa hubiera ganado el campeonato de pilotos 2008”. Esa carrera terminó siendo el efecto dominó para que al final de la temporada Hamilton se quedara con el título un punto por encima de Massa. El de Sao Paulo no volvería a pelear por un campeonato y abandonaría la F1 en 2017.
Horner podría ser despedido de Red Bull antes del GP de Australia
Una cumbre reunió este domingo en Arabia Saudita a Franz Watzlawick, CEO del Grupo de bebidas enegéticas Red Bull, el tailandés Chalerm Yoovidhya, propietario de mayoría de acciones (51%), y el director ejecutivo de la escudería de F1 Oliver Mintzlaff para discutir la crisis interna que atraviesa el equipo a raíz del caso Horner. Oficialmente no ha trascendido el resultado de estas conversaciones, pero mientras en la pista Max Verstappen siguió arrasando y junto a Sergio Pérez completaron el segundo doblete de la temporada para los de Milton Keynes, en los despachos la situación es cada vez más tensa y según han filtrado varios medios anglosajones, Horner podría ser despedido en los próximos días.