Previo al inicio de la pretemporada, Marcelo Gallardo sigue incorporando jugadores a su defensa. González Pirez y Mammana firman en la semana, mientras que el Millonario no da por caídas las negociaciones por Fabricio Bustos.
Mientras Marcelo Gallardo ultima detalles para lo que será la pretemporada del plantel Millonario en San Martín de los Andes, sigue sumando buenas noticias en lo que respecta al tema refuerzos.
En la mañana de ayer el defensor Leandro González Pirez se sometió a la revisión médica en el Centro Rossi y dado el éxito de la misma, en la semana firmará su contrato con River para así convertirse en el segundo refuerzo junto a Tomás Pochettino.
El central de 29 años, proveniente del Inter de Miami, firmará a préstamo por un año y arrancará la pretemporada directamente en San Martín de los Andes junto al resto de sus nuevos compañeros.
Cabe destacar que González Pirez no será el único defensor que sumará Gallardo, ya que está al caer el regreso de Emanuel Mammana, proveniente de Rusia. El central llegará libre dado que logró desvincularse del Zenit y quedar con el pase en su poder. Será otro de los repatriados al club Millonario para reforzar el fondo.
González Pirez debutó en River en el Clausura 2011. En total disputó 43 partidos con la Banda. Tras sufrir el descenso y formar parte del equipo de Almeyda que logró ascender a Primera división, se quedó hasta 2013 cuando fue cedido al Gent de Bélgica.
Volvió a River y formó parte del plantel campeón de la Sudamericana 2014, pero al no ser tenido en cuenta por Gallardo pasó a Tigre para luego llegar al Pincha, club que le permitió dar el salto al fútbol extranjero.
River no dará el brazo a torcer por Bustos
Y como bien reza el popular dicho, no hay dos sin tres. Cerradas las incorporaciones de González Pirez y de Emanuel Mammana, en River no se dan por vencidos y buscarán agotar instancias para convencer al lateral derecho Fabricio Bustos de que se incorpore al elenco Millonario.
La situación no es sencilla, desde Independiente no tienen reparos en negociar y entre los clubes habría un principio de acuerdo. El problema radica en el futbolista. Bustos quiere quedarse hasta junio en el Rojo, cumplir su contrato y poder irse como jugador libre con el pase en su poder a mitad de año. Para muchos, una mala decisión que es asesorada por parte de su representante Marcollese.
Desde Avellaneda, claro está, pusieron el grito en el cielo y amenazaron al lateral derecho con colgarlo hasta junio y no permitirle jugar ni con la Primera, ni la Reserva. Solo entrenar. Es por ello que en River creen que puede entrar en razón y así cumplirle el anhelo a Gallardo de contar con el cuatro que tanto desea.