Alejandro Gómez, Di María y Nicolás González merodean la cabeza de Lionel Scaloni para armar el equipo que en 48 horas se medirá ante el conjunto dirigido por Gustavo Alfaro en el inicio de la parte decisiva de la Copa. Lo Celso y De Paul vuelven a la mitad de la cancha.
Mañana arrancan los cuartos de final de la Copa América y la Selección Argentina corre con cierta ventaja: jugará en el último turno del sábado, ganando al menos unas cuantas horas más de descanso que otros rivales que desde el viernes comenzarán a jugarse un lugar en las semifinales del certamen.
Para este partido, Lionel Scaloni tiene decidido poner lo mejor que tiene a disposición, y el tal sentido, ese concepto reúne a por lo menos 16 jugadores de la nómina que llevó a Brasil.
Emiliano Martínez volverá a ser el arquero titular, mientras que en la defensa se apuesta al regreso de Cristian Romero, que utilizó los últimos 10 días para recuperarse de una molestia que sufrió en los primeros dos partidos de la fase de grupos.
La pelea entre Lisandro Martínez o el regreso de Otamendi promete un final incierto, ya que el rendimiento del exjugador de Vélez y del Manchester City (entre otros) dejó mucho que desear en el encuentro contra Chile por la primera fecha del Grupo A del certamen.
Marcos Acuña se perfila para seguir en el equipo titular ante la falta de explosión de Nicolás Tagliafico (se destacó siempre en Independiente pero nunca sobresalió o se consolidó en la Selección), mientras Nahuel Molina le gana la pulseada a Montiel, otro jugador que se destaca en el fútbol local, pero que al igual que Martínez Quarta o Armani están en deuda con la Selección nacional.
En la mitad de la cancha la situación está mucho más pareja y reñida, y no por ello, menos definida: Scaloni admite y reconoce el buen momento de Palacios, Alejandro Gómez y Guido Rodríguez, pero no se olvida de la base del equipo titular que tiene a De Paul, Nicolás González y Lo Celso para jugar junto a Paredes, detrás de Lionel Messi y Lautaro Martínez.
A priori, el equipo saltaría a la cancha con un 4-3-3, soltando al volante por la izquierda, que podría ser Di María, Nicolás González o Alejandro Gómez, quien se asoció muy bien con Lionel Messi.
De Paul estaría por la derecha, Lo Celso más libre por el centro y entre Guido Rodríguez o Paredes se definirá el principal dilema para enfrentar a Paraguay en el último turno del sábado.
El equipo entrenó ayer en Ezeiza y mañana viajará a Goiania, donde se jugará el partido de los cuartos de final ante el Ecuador de Gustavo Alfaro.