Vuelo triunfal de Rigoni con aterrizaje el próximo día 19

Por GALOPÓN

En una tarde soleada y algo ventosa, el teatro del turf del Barrio Hipódromo abrió sus puertas para ofrecer un programa de 13 carreras, coincidiendo con el primer día del mes de noviembre.

Uno de los momentos culminante de la reunión fue el Especial Haras La Manija (1.200 mts.), donde no hubo margen para las sorpresas porque el veloz Rigoni llevó a buen puerto su claro favoritismo, para imponerse por amplio margen sobre Lofoten. En tanto que tercero arribó Qué Presumido, completando el podio. Así el pupilo del entrenador Yei Yei Martínez visó su pasaporte para el Clásico Ciudad de La Plata (G. II-1.200 mts.)

La carrera estaba reservada para todo caballo de 4 años y más edad, ganador de tres o más carrereas y tan solo faltó a la cita Ondeador, por los que fueron cinco competidores los que salieron a beber vientos ni bien se abrieron las gateras. La cátedra inclinó su preferencia por Rigoni ($1,45), en tanto que también defendió buenos boletos Lofoten ($3,35). Trasladado el pleito a la pista, el veloz

descendiente de Cityscape llevó a buen puerto su favoritismo en forma desahogada, debido a que se impuso por cuatro cuerpos a Lofoten, en tanto a largo y medio culminaba Qué Presumido.

El ganador, llevado al triunfo por el jockey Eduardo Ortega Pavón, logró su quinta victoria en tan solo 13 salidas y primera de corte jerárquico. El vencedor empleó el gran registro de 1m10s 95/100 para los 1.200 metros de pista normal.

Ordenada la suelta, Qué Presumido primereó a Lofoten, quedando luego Rigoni, Berraco Song y Jolgorio Key, en ese orden. Formalizada la carrera, Qué Presumido corría con un largo de ventaja sobre Lofoten, quedando enseguida Rigoni por delante de Berraco Song y Jolgorio Key, que cerraba la marcha.

De esa forma, descontaron la recta de enfrente y el ingreso a la elipse de la calle 41 mostró a Qué Presumido corriendo adelante con pe­queña ventaja sobre el favorito que se le coló por los palos, moviéndose cerca, por afuera, Lofoten y en segundo plano quedaban Berraco Song y Jolgorio Key.

Promediando la curva la lucha por la delantera quedó para Rigoni y Qué Presumido, dando la impresión que entre ellos estaría el ganador de la competencia, con Lofoten intentando terciar.

Pero ni bien pisaron la recta, el favorito hizo trizas la ilusiones de sus rivales porque con firmes brazadas escapó rumbo al disco, que finalmente cruzó con cuatro cuerpos de luz sobre Lofoten que de atropelllada le birló dicho sitial a Qué Presumido, que debió conformarse con la tercera chapa del marcador.

El vencedor empleó estos parciales: 23s 86/100 para los primeros 400 metros y 46s 13/100 para los 800 metros.