De vedettes a animadoras infantiles

Mujeres que hoy se dedican a la animación y conducción infantil antes hicieron sus recorridos como referentes en los teatros de revistas o como bailarinas para la pantalla chica.

A lo largo de su carrera, Xuxa empezó como actriz de contenidos eróticos y luego dio el gran paso hacia las pasarelas.

Tiempo después iniciaría su recorrido en películas para adolescentes y luego devendría en la conducción de un show para niños.

Así en Brasil ardería con una audiencia genial para luego instalarse en la Argentina para hacer La hora de los bajitos, donde llegaba al programa con una nave espacial que la albergaba y era un detalle de última tecnología dentro de la utilería de los años 90.

También se convirtió en la dueña de éxitos resonantes hasta el momento como Ilarié y Juguemos a los indios, entre otros.

Hasta el día de hoy, los hits de Xuxa suenan en todas las fiestas familiares y de recreación como recibidas y casamientos.

Luego de terminar su carrera como actriz pornográfica e iniciar el camino hacia los más pequeños, Xuxa mantuvo vínculos sentimentales con figuras de primera línea, destacándose el jugador de fútbol Pelé, el automovilista Ayrton Senna y el conductor Marcelo Tinelli, entre otros.

La competencia en la Argentina era Flavia Palmiero, que iniciaba una carrera en la audiencia más pequeña pero luego se corrió para seguir como actriz.

Ahora es diseñadora de modas, trabaja en roles pequeños para el cine y acompaña a su novio en los festivales de cine más importantes del universo.

Panam, compositora

Pasados los inicios de los 90, Laura Franco estudiaba para ser maestra jardinera y a la vez trabajaba como empleada en la marmolería familiar.

Un buen día fue descubierta por Gerardo Sofovich, que la invitó a formar parte de su show, y así iniciaría su camino en los medios de comunicación.

Panam mpezó como secretaría del conductor y guionista. Luego sería la figura de entregas de comedia subidas de tono y también bailarina en las revistas que se presentaban en las temporadas estivales.

Sin embargo, esto no la hacía del todo feliz, así que decidió darle una conversión a la carrera, y mutó a animadora de espectáculos infantiles llenando teatros y cines.

Además compone canciones y se abocó a la maternidad de tres niños.

Es más, en una entrevista televisiva, la mujer habló amablemente sobre cómo deseaba olvidar su pasado como vedette. En el programa iniciaron un compilado sobre esa época, situación que no le resultó cómoda a Panam (que lo declaró públicamente). Hoy está plena y en paz.

Otras figuras contemporáneas

Por la misma época, los años 90, Cecilia Carrizo era modelo y vedette, luego se instaló en Miami y a la vuelta trabajó en la tribuna de Nico Repetto. Allí causó furor y comenzó con los programas que la convertirían en estrella para adolescentes y pequeños como lo fueron Caramelito en barra; Caramelito y vos; El arca de Caramelito, entre otros.

La mediática Nazarena Vélez también fue una de las precursoras ya entrado el cambio de milenio en dar un volantazo y presentó El mundo de Nazarena, una entrega que no tuvo demasiada trascendencia pero que llegó a estar en la pantalla chica. Allí era acompañada de un simpático robot llamado Cortocircuito.

En continuidad con el universo de los brillos y las plumas, Reina Reech incursionó aquí mismo para luego fundar Colores, una saga de obras y programas que la llevarían a la cima absoluta.

En este sentido, Iliana Calabró abandonó el perfil sexy por una temporada para ayudar a los ratones a encontrar monedas en el musical El ratón Pérez.

Adriana Brodski, por su parte, también fue la conductora de un show, una vez que terminó sus trabajos en las películas y los programas debido a la muerte del capocómico Alberto Olmedo.

Las más contemporáneas han sido Lourdes Sánchez, que inició como bailarina en el programa de Marcelo Tinelli para devenir en conductora infantil y panelista de los programas de chimentos. Lo mismo respecto a la carrera de Stefanía Xipolitakis que ahora canta, actúa y anima para los pequeños de la Argentina.