Griselda Siciliani y Lorena Vega vuelven a Envidiosa
La nueva temporada de la serie está disponible con más desventuras de Vicky y su analista Fernanda.
entrevistaLa nueva temporada de la serie está disponible con más desventuras de Vicky y su analista Fernanda.
07/02/2025 - 00:00hs
La esperada segunda temporada de Envidiosa ya llegó a Netflix con Griselda Siciliani como Vicky, la envidiosa que una vez más no sabrá realmente qué quiere. Junto a ella, un gran elenco del que se destaca Lorena Vega como Fernanda, su analista. Hablamos con ambas sobre el estreno y el encuentro en la ficción.
—¿Cómo están viviendo la previa del lanzamiento de la segunda temporada y el éxito que fue la primera?
—Lorena Vega: La estamos viviendo muy contentas, muy alegres. Como una fiesta, me parece. Todo el tiempo diciéndonos cosas lindas, diciendo mucho, no lo puedo creer, no lo puedo creer. Viste esto, viste lo otro, viste lo que pasó, viste lo que me dijo tal. Como vibrando mucho la repercusión y la fiesta que también se arma en la calle, afuera, con la gente, a cualquier lugar que vas, que produce mucha alegría, que es lo que pasa cuando haces reír a la gente y cuando se emociona. Para mí eso es muy lindo de recibir.
—Griselda Siciliani: Es una belleza. Hace mucho que no me pasaba y, comentando con colegas que no están en la serie, hace mucho que no le pasaba a nadie, de encontrarte con la gente en la calle y que la gente necesite hablarte de la serie. O sea, no es ni pedirte una foto porque sos Griselda, porque sos Lorena, porque sos quien fuera, sino hablarte de la serie y de lo que les pasó, de qué capítulo y de qué cosa, de una frase, de que yo soy como Vicky o que mi amiga no sé qué. Hay algo que el tema es ese, el tema es la serie y no hay ninguna otra bijouterie que moleste.
—Cuéntenme un poco el encuentro entre ustedes. ¿Habían trabajado juntas antes? ¿Cómo fue encontrarse y ser Vicky y Fernanda en la ficción?
—GS: No habíamos trabajado juntas. Nos habíamos visto trabajar y teníamos buena onda, como medio social, así, como de colegas, pero cómo es la gente que percibís que algo bueno puede pasar. Yo, en particular, sabía y quería que fuera ella la psicoanalista. Cuando me dijeron que estábamos buscando a Lorena, ya ahí era como que no podía pensar en otra persona. Estaba rogando que ella dijera que sí. Bueno, dijo que sí, por suerte. Y estaba muy emocionada porque me iba a tocar trabajar con ella porque, además, leía las escenas y eran todo mano a mano. Percibía que podía llegar a ser una fiesta el encuentro, pero el encuentro fue más. Fue un poco como pasó con la serie. Todo fue más de lo que esperábamos. Cada pequeña cosa.
—Porque, además, ustedes la grabaron, pero no estaba la repercusión en la calle. Hoy en día sería facilísimo el encuentro de ustedes o decir que escriban un capítulo especial, Vicky y Fernanda las dos, pero no sabían nada…
—GS: Grabamos la primera y la segunda temporada sin saber nada de lo que iba a ocurrir. Y fue un encuentro medio mágico. Lo hablamos muchas veces y ahora a mí me gusta que nos lo pregunten, porque así lo puedo decir públicamente. A mí me pasó como un amor total inmediatamente que me venía genial para actuar. Porque esta necesidad de Vicky, de ser aceptada por Fernanda, de buscar como el cariño de ella, además que Vicky primero no entiende nada del psicoanálisis. Y me pasaba lo mismo. Quería hacer cosas que le gustaran a ella. Entonces, era muy inspirador para actuar cuando el otro te es tan importante. Te puede amedrentar, pero una compañera tan... Si el compañero es generoso, te suma, te suma mucho. Así que fue como un encuentro de amor.
—LV: Bueno, yo coincido, así como con la definición. Encuentro de amor. Yo la escucho a Gris decir esto y me da mucho pudor porque digo... Es al revés, ¿quién no quiere actuar con ella? A mí me pasaba de mi lado que cuando me llegó la propuesta, para mí era una oportunidad riquísima en todo sentido y, fundamentalmente, por actuar con ella. Sabía que era desafiante, que iba a aprender un montón, que quería poder estar a la altura de todo lo que ella sabe y hace, que también yo quería que le guste mi trabajo. Tenía la intuición de que teníamos un código similar. Eso también es lo que nos percibíamos. También había cosas concretas. Las dos venimos del teatro. Más allá de que ella hizo después un camino súper, recontrafuerte en lo audiovisual y todo. Pero, bueno, somos de ese territorio. Somos de Flores, hay que decirlo.