"Bob Marley: La leyenda" lidera la taquilla internacional
La película del cantante de reggae es la más vista en lo que va de 2024.
Acaba de terminar una serie en México, tiene pendiente de estreno otra que filmó aquí y ahora presenta su nueva película, estrenada en el último Festival de Cine de San Sebastián.
27/02/2024 - 00:00hs
Los impactados es la nueva producción cinematográfica de Lucía Puenzo. Heredera de un linaje que lleva narrar historias en la sangre, sus producciones se han destacado por una cuidada dedicación y sorprendentes relatos. Recién llegada a Argentina se reunió con diario Hoy para adelantar detalles de esta producción que llega el jueves a las salas.
—¿Sensaciones de finalmente poder estrenar la película en Argentina?
—Con la situación dificilísima que estamos viviendo, primero es una celebración lograr estrenar en cines. Pepe, mi hermano, lo está dando todo, es el productor que se cargó al hombro el estreno. Porque nosotros estamos con Nico a cuatro manos filmando en México, y no nos podíamos ocupar y la verdad que él hizo todo. Estamos en una situación en la que solamente poder estrenar es una celebración.
—En tus películas está siempre presente el agua, aunque aquí, claro, están los rayos, pero hay algo de un proceso con el agua, como algo orgánico a todas las películas…
—Es cierto, en este caso el agua no es el de las profundidades, sino el agua que está en el cielo. Los impactados empezó con un guion que me acercó una amiga, Lorena Ventimiglia, que es artista plástica, muy amiga. Ella pinta paisajes y estaba fascinada por el universo de las marcas Lichtenberg, porque estaba en investigación, y empezó a escribir un guion, me ofreció que yo lo hiciera. Ella es la directora de arte de la película y alma también de la película, y así empezó todo, con esta punta de entrada que primero era un guion más cercano a la ciencia ficción. Y nosotros le entramos a los impactados por el universo de los grupos, que todo parece ciencia ficción, pero todo es real, inclusive lo de la distrofilia. Inclusive cosas tan particulares como que en sobrevivientes de impactos un órgano tenga un comportamiento tan distinto como puede estar en esta película, en los ovarios de la protagonista o todas estas extrañas anomalías que hacen transformar en ciencia ficción algo real. Y por ahí fue la puerta de entrada de esta película.
—¿Cómo fue sumarle tu parte al guion?
—A partir de nuestra propia curiosidad de entender como contradicciones en un mismo cuerpo, alguien que puede ser muy sexual y muy asexuada, muy peligrosa y muy inocente, angelical, y esas cosas que hay veces que en general la gente no lo tiene. La gente es más un color, no es muchos colores al mismo tiempo. Y también era un poco lo que yo sentía que tenía este personaje de Ada, que tenía que ser muy angelical y al mismo tiempo de mucha profundidad, como de difícil lectura, que fuera difícil decodificarla y eso yo creo que ya lo tienen como actriz Mariana, que es un poco insondable. Entonces eso me gustaba.
—En tu carrera cinematográfica, cada vez que presentás una película no es la película que se “esperaría”, hay algo de lo impredecible, ¿cómo hacés que se sumen a los proyectos?
—Yo confío en mis impulsos y lo transmito, y Los impactados desde el principio fue un proyecto como extraño en todo sentido. A mí me parece que en estos tiempos uno no tiene que hacer el ladrillito que es la película, que va después de otra película, a todo nivel, ¿no? Hay que poder tener la libertad de hacer cosas que no sabías desde el comienzo, aunque una película siempre es un híbrido extraño de difícil gestión que tal vez no encontraba un público tan masivo. Pero, sin embargo, no podía pensar en otra cosa y hay veces que ni siquiera sabes por qué, pero es el puro deseo de hacer algo y me parece que, y sobre todo me pasa, de encontrar con relación a estar al 100% siempre con todos estos proyectos de escala cada vez más enormes. Que películas como Los impactados me sirven para preservar el deseo y la fuerza de hacer, encontrando espacio en la agenda para reencontrarme con amigos de otras épocas. Llamar a un grupo de amigos y amigas actores y hacer algo, que te tirás a la pileta sin saber qué va a pasar, es algo que tengo que pelear por seguir haciendo, así como me voy a pelear por seguir estrenando nuestras películas en el cine. Me gusta no hacer lo esperable, aunque nos golpeen. Por eso, aunque de repente no sean tal vez las películas que estaban esperando en una carrera que va en cierta dirección, pero creo que si perdemos esa libertad, se complica. Hay algo que está muy mal, claro, yo fui muy feliz haciendo Los impactados, incluso en el no saber qué género era, cómo se combinaban sobre ese género. Nunca me pasó de encontrarme en la isla de edición con una película que no le encontrábamos la forma a tal nivel que sumamos la historia de su madre, que no estaba en el guion original. Los impactados era un thriller de un grupo de impactados y tuvimos la libertad en la isla de edición, sin presiones, de entender que faltaba el corazón emocional de la película, y había que escribirla, había que firmarla.
Los productores nos apoyaron una semana más, lo filmamos y se transformó en el corazón de la película. Entonces toda esa búsqueda, si uno puede decir tan poco ortodoxa en los proyectos de hoy, que son industriales, que tienen cinco semanas de montaje y tenés la fecha de estreno, acá fue tan de pura experimentación desde el primer momento hasta su estreno, que yo lo celebro mucho, de verdad. Porque a mí me dio una libertad de poder no estar siempre encasillada en que hay que hacer las cosas con cierta dirección. Y la verdad que la película finalmente se estrenó en San Sebastián, se está estrenando en toda Latinoamérica, se está estrenando en cines, la compra Netflix, entonces finalmente hizo un camino muy masivo desde un lugar superlindo y experimental. Yo creo que hoy, que los directores estamos descubriendo cómo va a ser nuestro cine, cómo es hacer películas hoy y que todavía estamos entendiéndolo. Te digo que la ecuación de Los impactados para mí es una ecuación que repetiría en toda su incertidumbre. Tal vez más que películas, en producciones más industriales, que parecen ser más seguras y esperables.