Juan Baldana y Shirley Briceño estrenan Reflejado
Basada en el libro Limpiavidrios de José Supera, la actriz y el director de la película reflexionan sobre el cine y llevar a la pantalla la historia.
entrevistaLa dupla protagoniza una comedia para toda la familia en la que una madre entiende que debe relajarse para reconquistar el cariño de su hijo.
06/12/2024 - 00:00hs
Hoy llega a Netflix Campamento con Mamá, de Martino Zaidelis, con el protagónico de Natalia Oreiro y la participación, entre otros, de Pablo Rago. La propuesta cuenta cómo una madre intentará transformar su espíritu controlador para reconquistar el cariño de su hijo. Hablamos con Oreiro y Rago para conocer detalles de la película.
—¿Iban de campamento cuando eran chicos? ¿Tienen algún recuerdo? ¿Los odiaban? ¿Les gustaban?
—Natalia Oreiro: Me encanta, y me encantaba ir de campamento. Llegué a ir de campamento también cuando empecé a salir de novia y tengo casa rodante. Me encanta.
—Pablo Rago: Todo lo contrario, no me gustan los campamentos, la naturaleza no me llama.
—NO: ¿En serio?
—PR: Te juro, te juro que a mí no, a mí dame, yo lo defino, a mí dame bidet.
—NO: Bueno, pero no hay que pensarlo en esos términos, tampoco te vas a ir un mes.
—PR: No, pero no es algo que me llama. De chico, por ahí, me gustaron un par de campamentos que fuimos, pero era obviamente el contexto de compartir con mis compañeros de colegio. Pero no, no es algo que me llame mucho la atención. A mí la única naturaleza que me gusta es la arena y el mar.
—NO: Mis padres no eran de campamento, pero yo iba mucho a club, o sea, sí, siempre hice mucho deporte y los clubes siempre te llevaban de campamento. Después iba con amigos, nos íbamos a las Termas en Uruguay, en Salto, nos íbamos en carpa y ya después en Buenos Aires, sí, siempre fue algo que me gustó. Ahora hace tiempo que no, pero yo voy mucho de campamento, mucho, tenemos carpa, mucho con la escuela, muchísimo, y es algo que le fascina.
—Pablo ¿cómo fue para vos irte de campamento, no con mamá, sino con Natalia Oreiro?
—PR: Fue muy divertido, la verdad que fue muy divertido. ¿Qué estuvimos? ¿15 días en Tandil?
—NO: No, más, la peli duró 7 semanas, y en Tandil estuvimos, ¿no estuvimos casi un mes? No, en Tandil un mes, un montón, todo febrero.
—PR: 20 días máximo, porque yo volví a ensayar.
—NO: Ah, vos, pero yo estuve todo febrero.
—PR: Fue muy divertido. Primero porque los chicos son divinos, más allá de lo que uno podía imaginar, 18 pibes de 12 años, ¿cómo va a ser esto? La verdad fue muy divertido, porque la contención que teníamos, que tuvimos todos, los chicos y los adultos también, de parte de la producción, hizo que sea llevadero. Una filmación es algo agotador, lleva muchas horas, teníamos traslados, no era tan cómodo como cuando estás filmando adentro de un estudio, pero la verdad que fue muy divertido, para mí fue una experiencia divina, los pibes son preciosos todos y todas. Y además hubo algo así de identificación de mi parte, porque yo a los 12 años también fui un niño que estuve en un set de filmación durante tanto tiempo, así que fue muy divertido. Y con Natalia me encanta trabajar. Nos reconocemos.
—NO: Este año cumplimos 30 años de nuestro primer trabajo juntos.