Científicos norteamericanos desarrollaron una aplicación que “podría frenar la propagación de la pandemia si todos la usaran antes de ir a la escuela, a una fábrica o a un restaurante o comercio”, según afirmaron.
La detección de casos de coronavirus podría estar a unos clics de distancia. Así lo anunciaron investigadores del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT) de Boston, Estados Unidos, quienes desarrollaron una aplicación móvil que reconoce a las personas asintomáticas portadoras del virus tan solo escuchando la tos en el teléfono.
El programa, que utiliza inteligencia artificial, es capaz de percibir un sonido característico que los humanos emiten al toser y, de este modo, testear si una persona está o no infectada. Según la agencia ANSA, los primeros resultados publicados en el IEEE Open Journal of Engineering in Medicine and Biology dan cuenta de un 100% de éxito en la detección de casos.
“La implementación de esta herramienta podría frenar la propagación de la pandemia si todos la usaran antes de ir a la escuela, a una fábrica o a un restaurante o comercio”, afirmó el investigador Brian Subirana.
Desde el MIT explicaron que en el futuro esperan convertir el desarrollo en una aplicación gratuita para teléfonos inteligentes, destinada a la detección masiva de casos, un factor clave para frenar la propagación de los contagios.
Los investigadores de la prestigiosa universidad detallaron que el novedoso sistema fue programado a partir de grabaciones de audio de toses recogidas en la web, en las que colaboraron voluntarios sanos y no sanos, incluidas personas afectadas por el nuevo coronavirus (tanto sintomáticos como asintomáticos).
La app, que se puso a prueba con mil grabaciones de audio, demostró identificar a las personas infectadas con una precisión del 98,5%, incluidos los asintomáticos: con este grupo el sistema logró identificar al 100% de los casos positivos de coronavirus.
Según explicaron, el nuevo sistema se construyó sobre los cimientos de un trabajo anterior, en el que los investigadores habían comenzado a desarrollar una red neuronal para reconocer a los pacientes de alzhéimer por la fuerza expresada por sus cuerdas vocales durante la tos inducida. Dicho proyecto llevó el nombre de “ResNet50”.