“Disfrutarte en bici”, un proyecto de inclusión que se expande

La iniciativa busca generar un espacio de convivencia y entretenimiento entre los niños y las familias, apuntando a tender redes entre las personas interesadas y dejando de lado el rol de “asistencialismo”.

Ignacio Calabró, kinesiólogo y padre de dos hijas, una de ellas con discapacidad, le dio impulso a un proyecto de inclusión al que luego se sumaron muchas personas para que niños y adolescentes con una limitación física puedan disfrutar de paseos en bicicleta con sus amigos y familia readaptando bicis viejas.

“Mi hija de 6 años con una diversidad funcional motora dijo en la escuela que quería correr carreras en bici y nos encontramos con ese desafío. Gracias a un amigo de la familia armamos la bici y de ahí salió la idea de hacer otras que son dobles”, relató Ignacio a diario Hoy.

Luego de ese primer impulso, comenzaron a sumarse colaboradores que pusieron su grano de arena desde el área específica de cada uno. El proyecto “Disfrutarte en bici” de la asociación civil Diversamente Posibles nació en el partido de La Costa pero ya suma adeptos de distintos puntos del país.
“Nuestra idea no es segregar, sino que vengan los chicos con discapacidad como así también los hermanos, los amigos y toda la familia para poder disfrutar y competir, algo que a mi hija Lourdes le encanta”, destacó.

Una actividad para todos

Ignacio marcó que la idea del proyecto no tiene que ver con un asistencialismo para las familias con discapacidad, sino que sea una actividad concreta que pueda replicarse en diferentes espacios en la medida que se alcance el financiamiento y los recursos.

“A todas las familias nos pasa lo mismo de no saber lo que va a suceder o cómo transitarlo. En general los chicos tienen diferentes actividades deportivas o de juego, los chicos con discapacidad tienen terapias o kinesiología. Entonces es importante que puedan tener un espacio donde realizar este tipo de actividad”, marcó el joven profesional.

En ese orden, Ignacio marcó que “es una actividad pensada para ellos. El otro día uno de los chicos paseaba con la mamá en la bici y su hermano iba al lado en otra. El motivo que nos une para encontrarnos y jugar es la bici, no la discapacidad”.

Redes solidarias

El proyecto apunta a generar un “modelo de derechos” para las y los chicos, que puedan vincularse desde la propia actividad de utilizar las bicicletas y no desde la discapacidad.

“Una de nuestras frases características es Nada de nosotros sin nosotros. Acá todos colaboran para que funcione, tanto los que donan como el herrero o las familias, por eso queremos seguir tendiendo redes y que cualquiera se pueda sumar para hacer esto lo más grande posible”, concluyó Ignacio.

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