El ataque de pánico afecta al 30% de la población mundial
Tres de cada diez personas en todo el mundo sufren ataques de pánico. En Argentina no hay estadísticas oficiales, pero se estima que más de 6 millones tuvieron algún síntoma relacionado y alrededor de un millón sufre concretamente el trastorno. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), responsable de la cifra alarmante, los ataques de pánico son una dolencia comprendida dentro de los trastornos de ansiedad.
"Desde lo que tiene que ver con lo corporal, el corazón se acelera, las manos transpiran, todo se ve ligeramente más brillante porque se te dilatan las pupilas. Los síntomas corporales son de alguien que se encuentra en alerta máxima”, explicó a Hoy la médico Psiquiatra, Liliana Irazábal.
Según los especialistas, los síntomas físicos son variados y pueden combinarse de diferentes formas. Los más frecuentes son: palpitaciones, sudoración, temblor de manos, piernas flojas, náuseas, molestias abdominales, mareos, dolor de cabeza, opresión en el pecho, sensación de ahogo o falta de aire y sofocación.
Entre los cognitivos se encuentran el miedo a morirse o a que algo terrible esté por suceder; miedo al desmayo y al descontrol, sensación de irrealidad o de extrañeza acerca de lo que pasa o de uno mismo y sensación de estar como en un túnel, como si estuviera obnubilado. "Por lo general, las crisis son aterradoras en el mismo momento en que se sufren, aunque la sensación de malestar pude durar días", acotó Irazábal. Sin embargo, marcó que "Lo peor es la sensación espiritual. Cualquier persona que haya pasado por un ataque de pánico dice que sintió que se iba a morir. Es importante trabajar el aspecto psicológico, porque además de los inconvenientes físicos repercuten en ese sentido”, finalizó.