El maltrato infantil, una práctica naturalizada

La violencia familiar alcanza a más de 5 millones de niños en nuestro país. Especialistas advierten sobre los riesgos de una problemática “invisibilizada”

Hoy, como todos los 25 de abril, se conmemora en el mundo el Día Contra el Maltrato Infantil, una jornada que invita a reflexionar sobre una problemática naturalizada que genera consecuencias muchas veces irreparables para toda la sociedad. En ese marco, especialistas advierten que para revertir esta tendencia es imperioso actuar de inmediato.

“A menudo somos testigos de situaciones de desprotección de los niños y las niñas. Con naturalidad, socialmente se toleran malos tratos, gritos, empujones, zamarreos, tirones de pelo, castigos corporales y humillaciones que forman parte del escenario habitual en que millones de niños crecen en nuestro país”, explicó la directora Nacional de Aldeas Infantiles SOS Argentina, Alejandra Perinetti.

Según datos del Fondo para la Infancia de Naciones Unidas, en la Argentina hay más de cinco millones de niños que sufren algún tipo de violencia en sus hogares. El dato expone la magnitud de una problemática “invisibilizada”, según Perinetti, y pone de relieve que al menos uno de cada dos niños sufre algún tipo de maltrato en el espacio primario que debe contenerlos, protegerlos y favorecer su desarrollo. “La violencia contra niños y niñas no discrimina, está presente en todas partes, en el seno familiar, en la comunidad, en las instituciones y atraviesa a todos los sectores sociales”, agregó la especialista.

Cuando la función protectora del adulto se altera y quienes deben contener y acompañar el desarrollo son quienes ejercen violencia, los infantes quedan expuestos a una gran fragilidad y vulnerabilidad emocional. Así, la violencia se instala como forma de relación con el mundo y se vuelve parte de lo cotidiano, explicaron. Este proceso termina resultando no solo devastador para el niño, sino también para el futuro de la sociedad.

Para Perinetti, “ningún tipo de violencia es justificable ni debe tolerarse. Desde el Estado y la legislación existe la obligación de proteger a los menores de toda forma de maltrato y, si bien hemos sido testigos de grandes avances en este plano, no es suficiente”. Para que el actual panorama cambie, desde la Aldeas Infantiles proponen que “la sociedad tome consciencia de esta situación y se involucre en su resolución. El primer paso es visibilizar la violencia”. 

Este compromiso interpela especialmente al Estado, pero también a las empresas, las organizaciones de la sociedad civil y todas las personas. En ese sentido, la problemática se volvió un aspecto central de la agenda de Desarrollo Sostenible 2030, acordada por los Estados miembros de la ONU, que entró en vigencia en 2016.