En La Plata, esta ocupación gana terreno en los meses de verano, aunque tiene funcionamiento durante todo el año. Claves de un fenómeno que se asienta en nuestra ciudad.
La manada sale a pasear: Cecilia tiene entre siete y ocho correas de las que tiran entre siete y ocho perros de todos los tamaños. Mauricio, su compañero, lleva a otros tantos. Un transeúnte podría decir que no son ellos los que llevan a los perros sino que los canes los llevan a ellos. Cuando llegan al parque algunos animales se revuelcan en el pasto y otros olfatean los rincones por los que antes pasaron sus pares. También corren, mueven la cola y posan para las caricias que siempre les regala algún niño.
Cecilia es una de las creadoras de Guardería Canina La Plata, un espacio para que las mascotas vivan en manada que funciona en la zona de Parque Castelli. En diálogo con diario Hoy contó que han llegado a tener 25 perros bajo su cuidado y lo fundamental para mantener el equilibrio y la armonía “es la paciencia que tengamos los humanos”.
“La Guarde –explicó– es un espacio pensado y organizado dentro de nuestro hogar, con la finalidad de recibir y hospedar a nuestros fieles compañeros y compañeras de cuatro patas, sin encierros y con el acceso libre a la casa, haciendo de su estadía lo más parecido posible a la vida que llevan con sus familias”.
Paseos y algo más
Entre las propuestas que lleva a cabo la Guardería Canina realizan talleres y ejercicios de socialización, tanto para cachorros como para adultos. Al respecto, Cecilia detalló: “Hacemos actividades de carácter lúdico, individuales y grupales como juegos de escondite, de agarres, varios ejercicios olfativos, métodos target de contacto con objetos, circuitos aeróbicos y todos aquellos que sirvan para trabajar su estimulación mental y canalizar su energía de manera positiva, utilizando las técnicas de la educación en positivo, sin castigos. Sumado a esto, también incluimos paseos recreativos diarios por plazas y parques de la zona, y todos aquellos juegos educativos y ejercicios que fomenten el vínculo con sus pares y sirvan para cubrir las necesidades básicas de cada perri”.
Los meses del verano, cuando es más común que las familias salgan de vacaciones, la guardería suele recibir más huéspedes. En estos casos, la estadía puede durar una noche, una semana, un mes, o más.
Cecilia, que estudió Zoología y desde hace más de cuatro años está al frente de la Guardería Canina, reveló a diario Hoy que “el motor principal siempre fue el amor hacia los animales. Tuve la suerte de tener una madre que me transmitió esto y me permitía traer a casa todo animal que necesitaba de algún cuidado en especial”.
En el último año, la manada recibe frecuentemente a un integrante muy particular: Chochán, un chanchito rescatado por un grupo llamado Rescatando Narices Frías. “Chochán nos visita con cierta frecuencia; al principio requería de cierto cuidado especial porque una de sus patitas no estaba muy bien, pero aprovecha al máximo sus tardes en la guarde socializando y jugando al igual que lo hacen los perros. Esto evidencia que no solo los animales de compañía tienen necesidades de interactuar y jugar, y muestra que la armonía y convivencia se puede dar siempre, más allá de que se trate de especies distintas”.