Centros culturales: “Es un momento de incertidumbre”
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De acuerdo con un informe reciente, la dieta de nuestros antepasados de la Edad de Piedra estaba compuesta principalmente por la carne de grandes animales.
11/04/2021 - 00:00hs
Según una idea muy extendida en el campo científico y cultural, una de las razones por las cuales la humanidad logró sobrevivir a los avatares de la historia fue su capacidad para comer de todo. Esa dieta de carácter omnívoro le permitió, a lo largo del tiempo, adaptarse a las diferentes geografías, los cambios climáticos y el desembarco de otros depredadores. Un reciente estudio de la Universidad de Tel Aviv, sin embargo, sostiene que los hombres fueron hipercarnívoros durante dos millones de años.
Publicado en el Anuario de la Asociación Estadounidense de Antropología Física, la investigación del doctor Miki Ben-Dor y el profesor Ran Barkai, del Departamento de Arqueología de la universidad israelí, apunta que la dieta de nuestros antepasados de la Edad de Piedra estaba compuesta principalmente por la carne de grandes animales. De acuerdo a este postulado, los humanos fueron “superdepredadores” y solo la extinción de la megafauna obligó a la especie a aumentar gradualmente la cantidad de vegetales en su nutrición.
“Hasta ahora, los intentos de reconstruir la dieta de los humanos de la Edad de Piedra se han basado en comparaciones con las sociedades de cazadores recolectores del siglo XX”, dice Ben-Dor. “Esta comparación es inútil, porque hace dos millones de años las sociedades de cazadores recolectores podían cazar y consumir elefantes y otros animales grandes, mientras que los actuales no tienen acceso a tal abundancia”.
En busca de “la memoria de nuestro cuerpo”, los investigadores examinaron unos 400 artículos científicos de disciplinas como la genética, la fisiología o la morfología. “El comportamiento humano cambia rápidamente, pero la evolución es lenta”, explica Ben-Dor, “el cuerpo recuerda”. Encontraron unas 25 líneas de evidencias. Entre ellas, el nivel de acidez el estómago humano y la estructura de las células grasas de nuestro cuerpo. Otras pruebas son de orden arqueológico. “Según los hallazgos de este estudio, los vegetales solo se convirtieron en un componente importante de la dieta humana hacia el final de la era”, concluyen.