El Planetario Móvil llega a la ciudad
La cita es en el Club la Canchita Futbolcinco, en avenida 7, entre 33 y 34, y no se suspende por lluvia.
El niño de 10 años tiene autismo y aprende de manera autodidacta cómo ser muralista. Dice que quiere dedicarse a eso cuando sea grande, igual que sus ídolos.
22/01/2023 - 00:00hs
Martín tiene solo 10 años, pero ya sabe lo que quiere para su futuro: ser muralista como su máximo ídolo, el artista platense Luxor.
El pequeño tiene autismo y, por el momento, aprende de modo autodidacta mirando videos por YouTube con el apoyo de su mamá, Carina. “Le gustaban mucho las pinturas y los clásicos, hasta que descubrió los murales acá en la ciudad y conoció a Luxor que hace dibujos increíbles, lo empezó a seguir. Lo acerqué a lo que pude y quedó fascinado”, relató Carina a diario Hoy.
Algunos de los dibujos de Martín los compartió en las redes una amiga de la familia y mencionó en el posteo al artista e historietista argentino Liniers, quien resaltó el trabajo de Martín y lo catalogó como “un genio”.
“Desde el arte se puede comunicar mejor, manejar las emociones porque el arte es terapéutico. Hace un tiempo una amiga le dio un libro de Kevin Johansen con Liniers y le abrió la puerta al mundo de las historietas y los personajes; le encantó ver que Liniers dibujaba a medida que los músicos tocaban y eso combinó todo lo que le gusta”, dijo la mamá.
Esta pasión viene de la cuna, ya que en la familia consumen mucho arte, en especial arte local, por gusto, aunque ninguno en la casa de dedica a ello de forma laboral. “Le damos valor y apreciamos mucho el arte local, eso también influyó en él”, subrayó Carina.
Por ahora, Martín es autodidacta, pero la idea de la familia es que pueda asistir a clases, por lo que estuvieron buscando a una persona que pueda enseñarle de forma particular porque el chico es muy hiperactivo. “Cuando se enteran de que es autista hay miedo en los demás, pero por la desinformación y el desconocimiento. Ahora que es más grande sabe que tiene que conocer las técnicas y aprender cosas nuevas. Nosotros lo animamos a que disfrute y lo tome como una posibilidad de futuro. Él está convencido de que va a ser muralista cuando sea grande. Dice que quiere ser artista como Luxor”, señaló la mamá.
Detrás de esta historia hay un mensaje: “Lo más importante es ver que tiene muchas ganas de hacer, de participar, de involucrarse; muchas veces se habla de que los autistas son personas aisladas porque hay muchas etiquetas y prejuicios, pero hay que darle la oportunidad a la gente, que él tenga la posibilidad de elegir y poder hacer lo que quiere”, remarcó Carina.