Los desbordes cloacales que colapsaron en los departamentos de la planta baja del complejo que está en calle 18 entre 529 y 530.
El barrio La Favela (y más concretamente los monoblocks) siempre estuvo inmerso de leyendas y mitos urbanos de La Plata. Sin embargo, ninguno le había destinado un capítulo a la construcción casera de un camino improvisado de ladrillos, entre los angostos pasillos de las torres, para sortear los desbordes cloacales que colapsaron en los departamentos de la planta baja del complejo que está en calle 18 entre 529 y 530.
Hasta allí llegó diario Hoy para recepcionar el reclamo de un grupo de vecinas que hace varios días vienen sufriendo enfermedades e irritación en la piel como consecuencia del foco infeccioso que se generó en este lugar.
Mientras una señora invita a realizar la recorrida por el interior del predio, otras vecinas se asoman por las ventanas de los departamentos superiores y cuentan sus historias.
La semana pasada se hizo el reclamo para que llegue un camión que pueda destapar las cloacas colapsadas y lograr que se desagote el agua acumulada.
Algunas personas mayores de edad que no pueden hacer equilibrio para pasar entre las piedritas y los ladrillos han optado por quedarse dentro de sus casas, casi sufriendo la desdicha de estar en una zona de la ciudad en donde la gente humilde y trabajadora ha elevado innumerables reclamos para poder vivir mejor.
“¡Llamé 18 veces a ABSA!”
Una de las vecinas consultadas por este diario no dudó en reconocer que hubo casi veinte llamados a ABSA para que puedan destapar las cloacas en este lugar.
“Llamé 18 veces a ABSA y no me dieron bola. También hice el reclamo a la Municipalidad. Y entre todos tuvimos que poner piedritas para poder llegar a la puerta de los departamentos. Pero algunos tienen agua adentro”, señalaron ante este multimedio.