Se reanudó la búsqueda del avión desparecido pese a las malas condiciones climáticas

La búsqueda del avión Mitsubishi desaparecido el lunes de la semana pasada en la zona del Delta con tres personas a bordo, se reanudó esta mañana por tierra, aire y agua pese a las adversas condiciones climáticas, con la ampliación de la zona de rastrillajes y la incorporación de drones al operativo.

"Seguimos trabajando en la zona con todos los elementos que tenemos", dijo a la prensa el titular de la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC), Juan Irigoín.

Irigoín indicó que "nuestra única preocupación es encontrarlos" y consideró también que "si hubiese sido un accidente y hubiera caído en el agua, estaríamos con dificultades para encontrarlo porque podría haberse hundido".

El funcionario recordó que se trata de "un avión compacto, fuerte, por lo que en caso de haber caído al agua bien podría haberse hundido entero, sin desprendimientos, pero no tenemos señales de balizas ni ningún otro elemento que nos lleve hacia esta posibilidad por el momento".

Hasta anoche el operativo había alcanzado más de 400 horas de vuelo sobre distintas zonas, algunas de las cuales fueron recorridas en varias ocasiones y se prevé que hoy se intensifique la duplicación de rastrillajes.

Del operativo aéreo continúan participando aeronaves de ANAC, de la Fuerza Aérea, de la Armada, de la Prefectura Naval, Gendarmería Nacional, Policía Federal, Policía Bonaerense, y de la Fuerza Aérea y la Armada uruguayas, y aeronaves civiles, a las que se sumaron drones para una visualización más cercana de zonas inaccesibles.

La búsqueda se realiza en más de 40 áreas que han sido barridas desde el aire con distintos tipos de aviones, entre los que se destacan aeronaves con radar de superficie, helicópteros con configuración de búsqueda y salvamento, y drones con tecnología de cámaras multiespectrales.
Desde el agua, la Prefectura Naval Argentina y Armada Argentina, con distintos tipos de embarcaciones (algunas con tecnología de sonar) siguen recorriendo desde esta mañana las áreas dispuestas por el comité de emergencia, mientras que, por tierra equipos especializados de Gendarmería Nacional y Prefectura, reanudaron su recorrido por las áreas asignadas realizando un barrido exhaustivo.

Angie Barbero, la esposa de Matías Ronzoni, el piloto del avión desaparecido, aseguró hoy que "no se inclina por ninguna pista en particular" y que "intenta estar enfocada en que en algún momento su marido va a aparecer".

"Desde el cariño se te cruzan mil cosas, pero yo siempre trato de estar enfocada en que en algún momento mi marido va a aparecer", dijo la joven en declaraciones televisivas.
Consultada sobre el audio difundido la semana pasada que daba cuenta de una conversación entre la tripulación del avión Mitsubushi extraviado el lunes, Angie contó que "lo escuchó pero no le hicieron pensar en ninguna pista particular ni generaron ningún tipo de certeza sobre nada".

Quien habla con la torre de control en ese audio que se viralizó no es su marido sino el copiloto Facundo Vega y según Angie ese dato no le despierta ninguna suspicacia porque "Matías es quien conoce y tiene más experiencia así que resulta lógico que él se encargue de volar y el copiloto de las comunicaciones".

Barbero recordó que Ronzoni es piloto privado desde 2012 pero comenzó a trabajar para la compañía agropecuaria Aibal S.A hacía cuatro meses.
"Yo no entiendo de aeronáutica pero él estaba muy preparado, él constantemente me decía que este avión tenía mucha más tecnología que los que había volado antes, que era más grande y estaba más preparado", dijo.