Un avance crucial hacia la cura del Parkinson
Un ensayo clínico demuestra que un tratamiento con ultrasonido pudo ayudar a controlar los movimientos involuntarios alterados de las personas con Parkinson.
cienciaUn ensayo clínico demuestra que un tratamiento con ultrasonido pudo ayudar a controlar los movimientos involuntarios alterados de las personas con Parkinson.
08/08/2025 - 00:00hs
Las personas con la enfermedad de Parkinson (EP) experimentaron una mejoría significativa en el temblor, la movilidad y otros síntomas motores tras someterse a un procedimiento mínimamente invasivo con ultrasonido focalizado, muestra un estudio publicado en el New England Journal of Medicine.
La estimulación cerebral profunda (ECP) se ha convertido en el principal tratamiento quirúrgico para las personas con EP que no tienen una buena respuesta a la levodopa. Consiste en la colocación quirúrgica de minúsculos cables en la zona cerebral deseada, que es estimulada mediante el envío de señales eléctricas a través de los cables. El ultrasonido focalizado es un tratamiento que emite ondas sonoras de alta intensidad en el cerebro, guiadas por resonancia magnética (RM). Donde se cruzan estas ondas, crean una alta energía, que genera calor, destruyendo una zona específica del cerebro relacionada con el temblor. Se considera no invasivo porque no implica incisiones ni agujeros en el cráneo.
En la gran mayoría de los casos, de forma inmediata el temblor mejora, un efecto del que el paciente se beneficia en una sola sesión.Al ser un procedimiento no invasivo, no necesita ingreso previo y, tras la sesión el paciente recibe el alta en 24 horas. Como en cualquier tratamiento, pueden aparecer efectos secundarios que, en la mayoría de los casos, suelen resolverse en pocas semanas. Un mes después el paciente volverá a revisión y, a partir de ese momento, se determinará el seguimiento que requiere por parte de los especialistas.
Lo cierto es que el ultrasonido focalizado se dirige a una parte del cerebro llamada globo pálido interno (GPi), que forma parte de los ganglios basales, una red de estructuras cerebrales que controla el movimiento. En el Parkinson, la pérdida de neuronas productoras de dopamina altera el funcionamiento normal de los ganglios basales. Esto puede conducir finalmente a una actividad anormal en el GPi y puede contribuir a los síntomas motores del Parkinson.
Este estudio examinó la seguridad y eficacia del ultrasonido focalizado en el GPi en un ensayo aleatorio de 94 participantes con síntomas motores de la EP. Sólo se trató el lado del cerebro opuesto al lado más sintomático del participante. De los 94 participantes, 69 fueron asignados aleatoriamente al grupo de ultrasonido focalizado y 25 al grupo de control, donde recibieron un tratamiento simulado (sin activación del ultrasonido). Cada participante recibió una evaluación clínica de la gravedad y progresión de su Parkinson antes y después del tratamiento. Casi un 70% de los participantes del grupo de tratamiento presentaron mejorías en los síntomas tras tres meses de seguimiento, en comparación con un 32% del grupo de control, que se sometió a un procedimiento inactivo sin ultrasonidos focalizados.
Este tratamiento puede ser eficaz para mejorar los síntomas físicos del Parkinson. Sin embargo, aún se desconocen sus efectos a largo plazo. Todos los participantes en el estudio serán objeto de seguimiento durante cinco años para evaluar los efectos y la seguridad del procedimiento a largo plazo. No obstante, el procedimiento tardará en generalizarse y estar cubierto universalmente por los seguros.